La corteza terrestre es la capa más externa de nuestro planeta y se divide en la corteza continental y corteza oceánica. Tal y como nos dice su nombre, la corteza oceánica es la parte de la corteza de la tierra que se dispone en los océanos. Es, por tanto, una parte muy importante, ya que ocupa dos terceras partes de la superficie de la Tierra, pero está mucho menos estudiada que la corteza continental. Por eso, en esta lección de unPROFESOR nos centraremos en las características de la corteza oceánica. Si quieres informarte, ¡acompáñanos!
Qué es la corteza oceánica
Antes de empezar a conocer las características de la corteza oceánica es importante que sepamos qué es la corteza oceánica.
Tal y como sucede con la corteza continental, la oceánica separa la superficie de la Tierra del manto terrestre, es decir, de la capa interior terrestre compuesta de materiales viscosos y de gran temperatura. Por lo demás, estas dos secciones de la corteza terrestre presentan grandes diferencias entre ellas.
- Para empezar, el grosor que presenta la corteza continental es mucho mayor que la oceánica, siendo en promedio de 35000 metros, frente a los 7000 de la oceánica.
- En segundo lugar, está la edad de las placas, siendo en su parte oceánica de unos 180 millones de años aproximados, mientras que en su parte continental de unos 3500 millones de años.
Características de la corteza oceánica y estructura
Antiguamente, se tenía la creencia de que el fondo oceánico era una gran llanura, pero con el tiempo se descubrió que la corteza oceánica presentaba accidentes geográficos al igual que la corteza continental. Así, en los fondos marinos también podemos encontrar montañas, fosas o volcanes e, incluso, percibir actividad sísmica y volcánica desde los continentes.
Aquí te dejamos un repaso de las características de la corteza oceánica y su estructura.
Márgenes y taludes continentales
Aunque hayamos dicho que la corteza oceánica está cubierta por el océano, hay que tener en cuenta que no empieza exactamente en las costas, sino que los primeros metros tras esta también se considera corteza continental. El inicio real de la corteza oceánica se encuentra en pendientes que pueden llegar a los 4.000 metros de profundidad y se encuentran a unos metros o varios kilómetros de la costa. Estas pendientes se llaman taludes.
Se denominan márgenes continentales a los espacios que existen entre las costas y los taludes. En estos márgenes las profundidades no son grandes, hasta de 200 metros, y es en ellas donde habita la mayor cantidad de la fauna marina.
Dorsales oceánicas
Las dorsales oceánicas son otra de las características de la corteza oceánica. Estas cordilleras submarinas son generadas cuando el magma del interior del manto, sube hacia la corteza y la rompe. Hoy en día existen cadenas montañosas submarinas que superan los 80000 kilómetros de extensión generadas a lo largo de los años.
Estas grandes cadenas de montañas poseen fisura en sus cubres por las que fluye magma desde el manto de forma continua. Gracias a esto, la corteza oceánica se renueva de forma continua. Esto explica por qué la corteza oceánica es mucho más joven que la continental.
Otra consecuencia de esta constante actividad volcánica es que las dorsales oceánicas emergen a la superficie marina, creando algunas formaciones como son la Isla de Pascua en el Pacífico Oriental o las Islas Galápagos cercanas al territorio de Chile.
Llanuras abisales
Esta son grandes extensiones planas que se encuentran entre los taludes continentales y las grandes dorsales oceánicas. Alcanzan profundidades que van desde los 3000 a los 5000 metros. El suelo de estas llanuras esta cubierto por capas de sedientos provenientes de la corteza continental.
En estas llanuras el agua es fría y en el entorno no llega mucha luz solar. A pesar de estos dos factores, aún se desarrolla vida en estas zonas, pero los organismos que aquí habitan poseen características físicas distintas a la vida del resto del mar.
Guyots
Estas son montañas con forma de tronco y cimas aplanadas. Se ubican en el medio de llanuras abisales y llegan hasta 3000 metros de altitud y 10000 de diámetro. Los guyots tiene estas formas porque sus cubres emergen a la superficie y son erosionadas por el oleaje hasta transformarlas en superficies planas. A veces esta erosión puede ser tal, que queden sumergidas hasta 300 metros por debajo de la superficie del mar.
Fosas abisales o fosas marinas
Estas son grietas estrechas y que pueden alcanzar miles de metros de profundidad en el fondo del mar. Las fosas marinas pueden surgir como consecuencia del choque entre dos placas tectónicas, de manera que también van acompañadas de cierta actividad volcánica y sísmica, que en ocasiones se deja sentir en la superficie de los continentes. Estos choques suelen producirse entre una placa oceánica y otra placa continental, por lo que al final estas fosas abisales quedan situadas cercanas a la corteza continental.
Estas fosas abisales son muy frecuentes encontrarlas en el borde Occidental del Océano Pacífico. Así, por ejemplo, en esta zona encontramos a la fosa que alcanza mayor profundidad de toda la tierra, llegan a sobrepasar los 11000 metros de profundidad. Es la conocida como fosa de las Marianas.
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