Antecedentes de la Guerra del Pacífico

Antecedentes de la Guerra del Pacífico

Ninguna de las guerras que el mundo ha vivido ha nacido de la nada, siendo todas ellas consecuencia de una serie de antecedentes y causas que llegados a un momento hacen inevitable un conflicto bélico más o menos largo que cambia las sociedades enfrentadas para siempre. Para hablar sobre una de las principales guerras dentro de la Segunda Guerra Mundial en esta lección de unPROFESOR vamos a hablar sobre los antecedentes de la Guerra del Pacífico.

¿Qué fue la Guerra del Pacífico?

La Guerra del Pacífico fue un conflicto que tuvo lugar entre 1937 y 1945, y que enfrentó a Japón y China, aunque con el paso de los años se añadieron una serie de Potencias del Eje y Aliados a la contienda, siendo especialmente relevante la intervención de los Estados Unidos.

Se podría decir que fueron varios conflictos en uno solo, ya que la guerra entre ambas potencias asiáticas era la Segunda Guerra Sino-Japonesa, que formaba parte de la Guerra del Pacífico en la que aparecían otras potencias como la de Estados Unidos, y siendo esta parte importante de la Segunda Guerra Mundial.

La importancia de este conflicto no fue solo por ser la derrota de una gran potencia como era Japón, sino que para muchos el fin de este conflicto fue el verdadero fin de la Segunda Guerra Mundial. El fin de la guerra está unido al ataque de bombas nucleares que cambió el mundo para siempre, y cuyas consecuencias aún se ven en el mundo actual.

Por otro lado la guerra tuvo también gran importancia para los estados en conflicto, causando el fin del Gran Imperio de Japón y comenzado un gran Guerra Civil en China que cambiaría al estado asiático para siempre. El fin de la guerra también afecto a otras potencias, siendo una caso de gran relevancia el de Estados Unidos, o el de otros territorios asiáticos en los que se comenzó a hablar de una posible independencia.

Antecedentes de la Guerra del Pacífico

Para continuar con esta lección sobre los antecedentes de la Guerra del Pacífico, debemos hablar sobre los numerosos hechos anteriores al conflicto que generaron un estado de tensión los suficientemente grande como para iniciar la guerra.

Japón como gran potencia

Hasta mediados del siglo XIX Japón había sido una región agraria, e incluso se podría decir que había sido una zona bastante pobre en comparación con otras de la zona. La llegada del emperador Meiji a la posición de líder del país japonés cambió esto para siempre, ya que el país asiático comenzó una expansión económica y una modernización que hizo que el país sufriera un cambio radical en tan solo sesenta años.

Japón comenzó el siglo XX como la mayor potencia industrial de la zona Oriental, siendo por lo tanto un país totalmente distinto que el que había comenzado el siglo pasado. Esta industria también afectó a la parte militar, comenzando una gran militarización que terminaría convirtiendo a Japón en una gran potencia bélica.

Primera Guerra Sino-Japonesa

Una de las situaciones más tensas en la zona de Asia era los conflictos que habían tenido lugar en la zona de Corea, ya que tanto Japón como China se disputaban la región. Las mejoras militares de Japón, y la situación de una especie de guerra civil en China hizo que Japón hiciera su primer movimiento para tomar la región, con un ataque por sorpresa sin hacer ningún tipo de declaración de guerra, dando inicio a la Primera Guerra Sino-Japonesa.

La victoria de Japón fue rápida, y obligó a China a firmar el Tratado de Shimonoseki, en el que China daba Taiwán, la Isla de los Pescadores y Liaodong a Japón. Y es que aun con la ayuda de Rusia, China era incapaz de derrotar a las fuerzas que Japón había formado.

Guerra ruso-japonesa y Primera Guerra Mundial

Al poco tiempo Japón declaró la guerra a Rusia, con un ejército aun más desarrollado y volviendo a atacar sin declaración de guerra anterior. La guerra se debía a la cada vez mayor influencia rusa en Manchuria y Corea, y al carácter imperialista del nuevo Japón. En un año los japoneses ganaron la guerra y obligaron a los rusos a firmar un tratado, en el que Manchuria era devuelta a China, pero Japón recibía otras posesiones y una serie de ferrocarriles rusos situados en puestos claves de los dominios chinos, que ya en ese momento parecían esenciales para una posterior guerra entre ambos países asiáticos.

Poco más tarde Japón entró en la Primera Guerra Mundial, derrotando a Alemania y consiguiendo nuevas posesiones en la zona septentrional asiática. En ese momento Japón parecía invencible para cualquier nación que quisiera enfrentarse en ellos en el plano militar.

Segunda Guerra Sino-Japonesa

En 1931 un tramo del tren que Rusia había dado a Japón fue destruido por unos explosivos, siendo esto usado como excusa por Japón para atacar y conquistar la región de Manchuria. Esta acción fue mirado con recelo por todas las grandes potencias del mundo, pero a Japón no le interesaba esta pequeña región, sino lo que quería era una expansión a mayor escala. La reacción internacional fue tal que Japón salio de varios organismos internacionales.

Finalmente la tensión explotó en 1937, comenzando un gran conflicto entre China y Japón que llevaría el nombre de Segunda Guerra Sino-Japones, para después entrar en el conflicto mundial llamado Guerra del Pacífico, y cuyas acciones fueron vitales para entender la Segunda Guerra Mundial.

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