Pintores impresionistas famosos y sus obras

Claude Monet fue uno de los pintores impresionistas famosos y uno de los fundadores del movimiento. La mayoría de sus obras son paisajes de la campiña francesa y paisajes marinos, reproduciendo en muchas ocasiones el jardín de estilo oriental de su casa. Monet, obsesionado con los cambios en el efecto de la luz sobre el paisaje y los objetos, trabajaba mucho sobre la misma escena para plasmar los cambios de luz y color. Es un pintor impresionista francés de gran renombre y muy conocido.

Una de sus obras más emblemáticas es Impresión: Sol naciente (1872). Esta pintura se presentó en el Salón de París en el año 1874, empleándose su título por un crítico de arte para hacer una crítica sarcástica sobre la exposición. La obra forma parte de una serie de lienzos en los que se representaba el puerto de Le Havre, su ciudad natal. En la obra muestra el efecto de la luz con una pincelada suelta y en la que solo hay colores claros.

Las amapolas en Argenteuil, 1873

Este cuadro también formó parte de las obras expuestas en ese salón de 1874 y en él se representa un campo de amapolas con una mujer y un niño y en el que se evoca el paseo por el campo en un día de verano.

La estación de Saint-Lazare, 1877

Monet realizó más de 12 lienzos en los que representó la estación de Saint-Lazare en París, tratando de mostrar un paisaje moderno y el efecto de la luz y el vapor.

Los Nenúfares, 1897-1899

Esta serie está constituida por unos 250 óleos sobre tela e inspirada en el jardín de su casa en Giverny.

La catedral de Rouen, 1892-1893

Otra serie de cuadros, esta vez de 30 lienzos, en los que re representa la Catedral de Rouen en diferentes momentos del día y desde distintos puntos de vista.

Manet se convirtió en el puente entre el realismo y el Impresionismo. Así, en sus primeros años mantuvo una técnica realista, si bien alejándose de los típicos temas academicistas y mostrando escenas tan controvertidas y escandalosas como Almuerzo sobre la hierba (1863) u Olympia (1863). Otras obras relevantes son El pífano (1866), El ferrocarril (1873) o Amazona de frente (1882).

Una de sus obras más destacadas, y su última obra, es El bar del Folies Bergere (1882), una escena que nos acerca al famoso cabaret de París, en la línea del movimiento impresionista por “democratizar” el arte.

Degas es otro de los pintores impresionistas famosos, aunque se consideró más realista que impresionista, si bien suele siempre asociarse con el Impresionismo por sus populares series de bailarinas. Pese a tener problemas de visión, Degas superó todos los obstáculos y se volcó en el arte cosechando numerosos elogios por la calidad de sus obras, si bien terminó su vida vagando por las calles y casi ciego.

Entre sus obras más destacadas se encuentra L'Absinthe (1875), obra considerada inmoral por mostrar a una mujer bebiendo absenta en un café. Degas, a diferencia de muchos impresionistas, prefirió el entorno urbano para su pintura y la figura femenina es habitual en sus otras obras como: Clase de danza, 1871, Ensayo sobre el escenario, 1874, Fin d'Arabesque, 1877.

La obra de Pierre-Auguste Renoir se caracteriza por sus colores brillantes y por su temática íntima, siendo la figura femenina, especialmente el cuerpo desnudo, una de sus constantes. El gusto por el plein air, el retrato y la naturaleza queda plasmado en obras como El columpio (1876), Baile en el Moulin de la Galette (1876) o Almuerzo de remeros (1881). Su pincel refinado y su exquisito colorido es otra de sus constantes.

En su obra Las grandes bañistas (1881-1883), se vuelve más clásico y disciplinado, renunciando a pintar al aire libre y centrándose más en pintar desnudos femeninos.

Defensor acérrimo de la pintura al aire libre, Pissarro se volcó en pintar paisajes y escenas rurales. Al final de sus días, y debido a su enfermedad, Pissarro se trasladó a la ciudad y se dedicó a pintar desde una ventana, mostrando las calles de París y Ruán.

Pissarro está considerado como uno de los impresionistas puros junto con Monet y Sisley al preocuparse más por la interacción de la luz que por el escenario. Entre sus obras más destacadas se encuentran Entrada a Voisins, 1872 y Primavera: ciruelos en flor, Pontoise, 1877.

Mary Cassatt, defensora de la igualdad de derechos de la mujer y dolida por la exclusión de la mujer en el mundo del arte, centró su obra en mostrar la vida cotidiana de las mujeres y escenas de la maternidad. Mary terminó siendo una de las cuatro pintoras aceptadas por los impresionistas, junto con Berthe Morisot, Eva Gonzalès y Marie Bracquemond.

Entre sus obras se destacan: Niña en un sillón azul, óleo de 1878, En el palco (1879), Maternidad (1890), pastel y Jules secado por su madre (1900), entre otras.

Terminamos este repaso a los pintores impresionistas famosos para hablar de Alfred Sisley, junto con Monet y Renoir, es uno de los impresionistas puros y uno de los que más trabajaría al plein air. Se centró en los paisajes, más que cualquier otro artista impresionista, con alguna desviación ocasional hacia el trabajo figurativo.

La Chemin de la Machine fue pintada por Alfred Sisley en 1873 y está considerada como uno de los mejores ejemplos de pintura al aire libre. Otras obras destacadas son La Seine a Argenteuil (1872), Regata en Molesey, 1874, Inundación en Port-Marly, 1876 y La terraza de Saint-Germain en primavera, 1875.

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