Postes azules de Pollock - significado y comentario

Pollock comenzó a pintar a principios de la década de los 30, acercándose en este momento inicial al socialismo realista mexicano de Diego Rivera y José Clemente Orozco. Pero, tras descubrir el surrealismo europeo en una exposición en Nueva York en el año 1936 y acercarse a la figura de Picasso, el pintor comenzará a descubrir su propio estilo. Entre las características más destacadas de este estilo:

• El goteo o dripping es su técnica pictórica de referencia. Una técnica que consiste en hacer que el color caiga directamente del pincel o desde el tubo o frasco sobre el lienzo.
• Este tipo de técnica se inscribe dentro del action painting, una tendencia artística en la que el artista es libre para moverse y que tiene su origen en las creaciones automáticas de los surrealistas, pero, a diferencia de ellos, Pollock, atraído por el análisis junguiano, trataba de sacar al exterior el inconsciente, además de inspirarse en motivos primitivos.
• Pollock fue la figura central e inspirador del expresionismo abstracto.

Empezamos entendiendo el significado de Postes azules, una obra expuesta en la National Gallery of Australia. Un gran cuadro, de 4.9 metros de largo y 2, 10 metro de alto, pintado por Pollock en el año 1952, momento en el que el expresionismo abstracto ya era notorio y en la que su técnica de goteo estaba en su plenitud. La obra está realizada sobre un lienzo sin estirar y colocado sobre el suelo, en el que el goteo, las salpicaduras y el vertido de pintura nos muestra el gran esfuerzo físico que requiere esta técnica de Pollock.

Una técnica que puede incluso llegar a considerarse como una actuación, casi un espectáculo, ya que Pollock no empleaba las herramientas de pintura habituales, decantándose por el uso de palos y latas de pintura, formando todo parte de una experiencia inconsciente, de una especie de espectáculo. Una obra que contrasta mucho con las obras clásicas de Pollock al incluir colores eléctricos, unos colores que no aparecen en las paletas más tradicionales y naturales de pinturas anteriores del artista, con tonos de color pastel.

Postes azules es pues una obra muy ambiciosa y de transición en todos los sentidos. Así, no solo es una transformación en lo que al color se refiere, también en el manejo de la composición. Pollock continua en esta obra con la composición all-over, esto es, la distribución más o menos uniforme de los elementos pictóricos por toda la superficie del lienzo, pero con un paso más en la abstracción al presentar ocho barras azules cruzando el lienzo. Y es que las barras azules reintroducen la noción convencional de figura, pero sin hacer concesiones a la perspectiva.

Siguiendo con el comentario de Postes azules debemos remarcar que se convirtió en una obra muy alabada y celebrada, siendo enorme el impacto de la complejidad de la obra pictórica de Pollock. El pintor, ridiculizado en un primer momento por la prensa estadounidense al calificarlo en 1949 como “Jack the Dripper”, paso a ser reconocido como uno de los más grandes artistas del siglo XX con esta obra.

Pollock señalaba que en su técnica nada quedaba al azar y que todo estaba meditado y pensado para que el espectador pudiese sentir todo aquello que estaba en el inconsciente del mundo moderno. En el caso de los Postes azules, el lienzo muestra unos postes que recuerdan a figuras esquemáticas sobre un fondo, rememorando en la mente del espectador figuras como árboles o mástiles.

El pintor construyó la obra de forma minuciosa y muy elaborada de muchas capas de colores y líneas entrelazadas. Pollock aplicaba la pintura de forma rápida sobre un lienzo extendido sobre el suelo y sin un bore definió hasta que se enmarcó. En la zona central se concentran los postes azules, concentrándose la abstracción en los bordes y las esquinas.

El cuadro suscitó cierta polémica al ser adquirido por la Australian National Gallery en 1973. El precio por el que se vendió constituyó un récord mundial para una obra de un artista del siglo XX, además de ser la base de muchas de esas críticas y polémicas. Las discusiones se extendieron a la calidad artística del pintor, si bien el impacto global del expresionismo abstracto era ya indiscutible y Postes azules encarnaba como ninguna otra obra el ideario de este movimiento artístico, siendo Pollock su máximo representante.

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