Proceso de romanización de la Península Ibérica

Proceso de romanización de la Península Ibérica

En esta lección de unProfesor te vamos a explicar el proceso de romanización de la Península Ibérica. La romanización, que es el proceso de aculturación mediante el cual los pueblos conquistados por Roma fueron adquiriendo paulatinamente su civilización, se inició con la conquista romana de la Península, que podemos dividir en tres etapas.

Después de introducir elementos propios de su organización social, cultural, se encontraron con las tribus indígenas, de las cuales se terminaron imponiendo los romanos y de este modo conquistando la Península Ibérica fundando un gran número de ciudades a lo largo del territorio.

Si quieres conocer todos los detalles del proceso de romanización de la Península Ibérica, no te pierdas esta lección y practica con los ejercicios imprimibles que te dejamos a continuación.

¿Cómo fue el proceso de romanización de la Península Ibérica?

La romanización de la Península Ibérica fue el proceso por el cual los habitantes de la zona de Hispania fueron adaptando la cultura romana, cambiando las costumbres y creando una serie de características que perduran hasta nuestro tiempo.

El proceso de romanización fue largo y progresivo, ya que la invasión romana fue un proceso que duró siglos, y, por lo tanto, muchas de las culturas hispanas se mantuvieron sin influencia romana durante mucho tiempo. Poco a poco, los romanos fueron ocupando las principales localizaciones de Hispania y los pueblos fueron adaptando elementos definitorios de los romanos.

Fueron muchos los factores que ayudaron a la romanización de la zona, ayudando a que el proceso fuera más sencillo para los intereses romanos. Entre estas causas debemos hablar sobre los siguientes:

  • Creación de infraestructuras típicas de los romanos, como fueron las calzadas o los saneamientos de las ciudades.
  • Comercio entre los pueblos hispanos y los romanos.
  • Fundación de colonias en Hispania, provocando que los romanos fueran ocupando ciudades en la zona.
  • Afianzar el sistema administrativo romano en las provincias hispanas.
  • Los señores romanos se quedaron con grandes posesiones de tierra en la zona.

¿Cuándo se inicia la Romanización?

La larga extensión de la romanización provoca que sea difícil hablar sobre una fecha de iniciación del proceso, ya que fue muy larga y tuvo numerosas fases. Podríamos decir que la romanización de la Península Ibérica comienza en el 218 a.C., cuando durante la Segunda Guerra Púnica los romanos se comienzan a interesar por las regiones que conforman esta zona.

Los romanos comenzaron a tomar algunos de los principales municipios de los hispanos, pero la realidad es que la mayor parte de esfuerzos romanos se centraron en ciudades fundadas por ellos, como Tarraco, Itálica o Cartago Nova. Fueron en estas ciudades donde las personas sufrieron más la romanización, desde donde se fue ampliando por toda la región.

Por ello, la romanización se inicia en el año 218 a.C., y se alarga durante alrededor de 200 años, durante los cuales los romanos fundaron ciudades y se enfrentaron a los nativos que no querían cambiar su cultura por la romana.

Causas de la romanización de Hispania

Un proceso tan largo y complejo como la romanización nace de una gran cantidad de causas, siendo esenciales estas para entender por qué los romanos decidieron expandir su cultura por esta amplia región. Por ello las principales causas de la romanización de Hispania son las siguientes:

  • La rivalidad con Cartago para controlar el Mediterráneo. En un primer momento, la llegada de los romanos a Hispania estuvo marcada para detener el avance de Cartago por esta zona. Durante la guerra contra los africanos, los romanos tomaron gran parte de Hispania, dándose cuenta de lo importante que era la región para sus intereses.
  • Roma necesitaba nuevas fuentes de riqueza para mantener el gran imperio que estaba formando, y las minas de Hispania daban una enorme cantidad de recursos, por lo que era necesario tomar la zona.
  • Los soldados romanos estuvieron mucho tiempo en Hispania por las guerras, por lo que influenciaron a los nativos en la romanización.
  • Los romanos crearon calzadas en la zona, causando que la comunicación entre los pueblos hispanos fuera más sencilla, y facilitando con ello el sentimiento de unión.
  • Los hispanos fueron los primeros colonos en recibir la ciudadanía romana, por lo que su apego con los romanos era mucho mayor que otros pueblos, facilitando la romanización.
  • Muchos romanos que se encontraban en una mala situación social y económica en Roma decidieron viajar hasta Hispania para conseguir nuevas oportunidades.
  • Los líderes hispanos decidieron que era mejor aceptar la conquista romana para sobrevivir, tomando por ello muchas de sus costumbres.
Imagen: Eolapaz

Fases de la romanización de la Península Ibérica

El proceso de romanización de la Península Ibérica fue muy largo y, por ello, podemos hablar de diferentes fases de la romanización. Esto nos sirve para ver la evolución que tuvo a lo largo de la Península Ibérica.

Las 3 fases de la romanización fueron las siguientes:

  1. La primera parte de la romanización tuvo lugar entre los años 218 a.C. y el 201 a.C., siendo cuando romanos y cartagineses se enfrentaron por dominar la Península Ibérica. En esta primera fase los romanos tomaron el control de la zona este y sur de Hispania, es decir, del litoral mediterráneo y los valles del Ebro y del Guadalquivir.
  2. La segunda fase de la romanización tuvo lugar entre el 197 a.C. y el 29 a.C., estando marcada por la dominación de la zona interior. En esta etapa los romanos conquistaron el centro y oeste de la Península Ibérica, venciendo a los celtíberos y a los lusitanos.
  3. La tercera y última fase de la romanización tuvo lugar el 29 a.C. y el 19 a.C., y estuvo marcada por la conquista de los romanos de la parte norte, terminando con ello la dominación de toda la Península Ibérica. Durante estos años los romanos vencieron a los astures y cántabros, consiguiendo romanizar toda la región hispánica.
Imagen: La romanización

Consecuencias de la romanización

Para comprender la importancia del proceso de romanización de la Península Ibérica en la historia de España, debemos enumerar las principales consecuencias que trajo a los hispanos.

Las principales consecuencias de la romanización fueron las siguientes:

  • El latín se convirtió en la lengua principal de la Península Ibérica, lo que años más tarde haría que aparecieran lenguas romances como el español o el portugués.
  • Se fundaron ciudades al estilo romano, cambiando el sentido de las ciudades hispanas para siempre.
  • Los romanos trajeron grandes innovaciones como el alcantarillado o los acueductos.
  • Se crearon calzadas por toda la región, permitiendo una mejor comunicación entre todos los territorios.
  • Los hispanos comenzaron a tener relevancia para los romanos, y con los años algunos incluso llegaron a ser emperadores.
  • La organización territorial romana trajo grandes cambios en la región, sentando las bases de la organización histórica de España.
  • Los romanos trajeron sus leyes, surgiendo el llamado derecho romano en la región.
  • En Hispania se fijaron muchos de los elementos culturales romanos, cambiando las tradiciones de la zona para siempre.

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Bibliografía
  • Guzmán Armario, F. J. (2002). La romanización de la Península Ibérica: Reflexiones sobre un debate historiográfico.
  • MATA, I. M. ROMANIZACIÓN DE LA PENÍNSULA IBÉRICA. ESTADO DE LA CUESTIÓN.