Literatura modernista catalana: características

El movimiento modernista surge como reacción contra el excesivo tradicionalismo que estaba viviendo la cultura catalana en aquel momento (finales siglo XIX). Europa asistía a una potente Revolución Industrial inglesa que dejaba huella también en otros países y ciudades como es el caso de Barcelona.

En búsqueda de una ciudad más libre y progresista, el arte empezó también a reflejarlo y fue así como se manifestó en el movimiento modernista. En literatura concretamente, las composiciones empezaron a ser ricas y contradictorias, mucho más complejas que antes.

Empezaron las denominadas "Fiestas modernistas" de Sitges y revistas como "Pèl i Ploma" o "L'avenç" acogieron trabajos bajo este estilo, haciéndolo más conocido. Así pues, el modernismo llegó y lo renovó todo dentro del mundo artístico.

Vamos a entrar ya de lleno en la materia que nos ocupa y a descubrir cuáles son las principales características de la literatura modernista catalana.

1. Alusiones a los sentidos: búsqueda de la belleza perfecta. El artista se considera un bohemio que vive fuera del mundo cotidiano y busca la verdad de la existencia mediante el placer y lo bello. Idealizan al solitario y al marginado, lo pintan como una figura intelectual que planta cara a las masas y a las multitudes. La sociedad intenta asfixiar las pretensiones del personaje.
2. Defensa de la lengua moderna fuera de vulgarismos. Se centraron sobre todo en el mundo rural.
3. Sinceridad. Otra de las características de la literatura modernista catalana es que el autor pretende retransmitir tal cual eran sus estados de ánimo a través de la descripción subjetiva de personajes y objetos.
4. Reproducción de las tensiones entre el artista incomprendido y la sociedad burguesa. Buscan estar por encima de ellos. Gran influencia de Ibsen y Nietzsche en esto.
5. Fuerte simbolismo en las narraciones que refleja un aura misteriosa.
6. Carga erótica a menudo reprimida que explota en las obras.
7. Visión trágica del mundo rural. Las acciones suelen representarse en un contexto de no-ciudad, no se considera el mundo rural como un sitio idílico sino que se enfoca como un sitio oscuro, crudo, pesimista. La naturaleza refleja las fuerzas más primarias, los instintos, lo bruto. En el modernismo se creía que la naturaleza era aniquiladora del individuo, de la libertad y de la fuerza creativa.

1. Regenaracionismo: Deseo de transformación y cambio social. Las creaciones literarias pasan a ser obras de denuncias y llenas de crítica y/o compromiso político con la situación de la sociedad. Creían que Cataluña estaba abocada a la decadéncia si no pasaba pronto por un proceso de modernización. El artista es una figura que no solo crea sino que también guía a toda la sociedad en el camino del cambio. Encontramos, por ejemplo, la figura de Joan Maragall y una alta influencia de la filosofía de Ibsen y Nietzsche.
2. Esteticismo: El arte por el arte. El artista no tiene por qué buscar una reforma social, simplemente busca crear y causar una renovación artística, no social. Creían que el artista era un ser superior y diferente a las demás personas de la sociedad y opinan que deben crear belleza para que se goce de ella. Uno de los máximos representantes de esto es Santiago Rusiñol, creador también de las ya mencionadas anteriormente "Fiestas modernistas" de Sitges.

Autores modernistas de novela:

• Víctor Català: "Solitud", "Drames Rurals"...
• Prudenci Bertrana: "Josafat", "Proses bàrbares"

Autor modernista de poesía:

• Joan Maragall: "Les disperses", "Poesies".

Autor modernista de teatro:

• Santiago Rusiñol: "L'auca del senyor Esteve", "Cigales i formigues"

Terminamos esta lección de las características de la literatura modernista catalana hablando sobre el teatro, ya que sufrió una renovación profunda y fue uno de los géneros más característicos del modernismo, ya que cumple con los requisitos del arte-síntesis o arte total por lo que es capaz de mezclar tanto literatura como arquitectura, música e interpretación, creando una complejidad que el modernismo buscaba. Por ello, hemos querido dedicarle un apartado en concreto.

Corrientes teatrales

1. Teatro Regeneracionista, Vitalista o Ibseniano: Teatro enfocado a lo social y a las ideas de crítica. Análisis psicológico bajo un halo de misterio. Temáticas: libertad individual en conflicto con los derechos colectivos. Problemas cotidianos, la realidad se incorpora en las escenas. (Ejemplos: Joan Puig i Ferreter, Pous i Pagès).
2. Teatro Esteticista, Simbolista o Maeterlinkiano: Expone realidades transfiguradas, simbólicas, confusas. Busca causar en el espectador impresiones variadas y los personajes suelen ser seres dominados por la tristeza. (Ejemplos: Adrià Gual, Santiago Rusiñol).

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