Metáfora y símil diferencias y ejemplos

Una metáfora es una figura retórica que utiliza el sentido figurado del significado de las palabras. Usualmente, la metáfora se usa para referirse a algo, pero sin nombrarlo directamente.

• Por ejemplo: "A partir de hoy te voy a tener bajo la lupa". Esta metáfora hace referencia a que va a tener vigilado al sujeto y la frase literal podría ser similar a esta: "A partir de hoy te voy a tener vigilado".

La metáfora es un recurso muy empleado en la literatura, sobre todo en el campo de la poesía, pero también en el habla coloquial. Sirve para dar un significado diferente a las palabras del que tendrían si las leyéramos literalmente. La metáfora puede tener una finalidad estética, es decir, ser utilizada para embellecer una oración, de forma que esta quede más poética; pero también puede tener una función irónica, cómica, de sorpresa, etc.

• Por ejemplo: "Vamos a trabajar que el tiempo es oro". Esta oración se podría traducir como: "Vamos a trabajar, que el tiempo es muy preciado". Pero en ningún momento se está refiriendo a que el tiempo tiene el mismo color que el oro o la misma textura.

Las metáforas son capaces de relacionar dos capos diferentes que tienen semejanza en algún aspecto concreto. Para conocer mejor este tema, te aconsejamos leer estas otras lecciones sobre Metáfora - Significado y ejemplos y Tipos de metáforas.

El símil es una figura retórica que también es conocida como "comparación". Este sirve para mantener una relación entre un concepto real y otro imaginario.

• Por ejemplo: "Tu exnovia era fría como un témpano". Esta oración hace referencia a que su exnovia era muy fría y compara este adjetivo con un objeto que se caracteriza por ser muy frío, en este caso un témpano de hielo.

Se trata de un elemento muy fácil de identificar, ya que siempre se nombrarán los dos elementos que se comparan y tendrán en medio un nexo comparativo. Por lo general, estos nexos comparativos suelen ser los siguientes: como, cual, igual que, semejante a, tan, etc. Aquí puedes conocer más sobre los Nexos para unir oraciones - ejemplos.

En la literatura, se usa esta figura para elevar algo cotidiano y hacer que tenga una belleza estética superior o un impacto más fuerte en el lector. En el lenguaje hablado también solemos utilizar una gran cantidad de símiles para hacernos entender y captar la atención de nuestros oyentes.

• Por ejemplo: "Mi corazón está abierto a ti como un tesoro". Es una forma bonita de decir que te entrego todo lo que hay dentro de mi corazón y, además, causa un impacto más profundo en la persona que lee la oración.

Los símiles también pueden adquirir un tono humorístico y sarcástico, cargado de ironía.

• Por ejemplo: "No corras más, que estás sudando como un testigo falso".

Te aconsejamos echar un vistazo a esta otra lección sobre Comparación o símil: definición y ejemplos.

Aunque estas dos figuras del lenguaje puedan parecer muy similares a simple vista, existen algunas diferencias que nos ayudarán a identificar si nos encontramos frente a una metáfora o frente a un símil:

• El símil compara el significado de dos cosas que tienen una característica en común, mientras que la metáfora directamente sustituye a una por la otra.
• En el símil se ve claramente cómo se está comparando un concepto con el otro, mientras que la metáfora descarta el elemento real para quedarse solamente con el ficticio.
• El símil siempre será una comparación, en la metáfora se entiende cuando se utilizan frases en sentido figurado.
• El símil es muy fácil de comprender, mientras que la metáfora necesita de más conocimientos de lo que se sustituye para ser comprendido.
• Mientras el símil vincula los dos conceptos que se comparan con un nexo, la metáfora no usa ninguna unión.

Te dejamos con algunos ejemplos de metáforas y símiles, para que puedas ver cómo funcionan dentro de un contexto específico.

• Sus manos, suaves y bellas como el terciopelo. (Símil)
• Rizos amarillos cual oro. (Símil)
• Ellos seguían sin moverse, quietos como estatuas. (Símil)
• Los mundos sutiles, como pompas de jabón. (Símil)
• Come como una lima. (Símil)
• Peligroso como mar tormentoso. (Símil)
• En esa fiesta me llovieron regalos. (Metáfora)
• Ese lugar es un paraíso. (Metáfora)
• Tu voz es música para mis oídos. (Metáfora)
• Queda un largo camino para tu boda. (Metáfora)
• Está en las nubes. (Metáfora)
• Está tan nervioso que se sube por las paredes. (Metáfora)

Esperamos que esta lección sobre las diferencias entre la metáfora y el símil te haya podido servir de ayuda para aprender un poco más de la lengua española. Si estás interesado en seguir conociendo más acerca de este tema, no dudes en consultar nuestro apartado de conceptos literarios. Además, te animamos a descubrir en esta otra lección Qué son las figuras retóricas, entre las que encontramos la metáfora.

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