Aprender un nuevo idioma es una forma de expandir nuestro conocimiento, no solo porque estamos adquiriendo una nueva forma de comunicación, sino porque comprender las raíces de algo nos permite expandir nuestro entendimiento por medio de los conceptos que utilizamos a veces sin conocerlos del todo.
La música es un arte pero es también se considera un lenguaje, porque nos permite una comunicación profunda. Sin embargo, al ser un lenguaje complejo es necesario aprender las reglas ortográficas y gramaticales, en la versión musical. En este artículo de unPROFESOR hablaremos acerca de una de éstas áreas en la escritura musical: las alteraciones musicales: definición y características.
Conceptos previos a las alteraciones musicales
Para poder comprender mejor la definición de alteraciones musicales es necesario tener claros los siguientes conceptos:
Afinación
La afinación puede traducirse en términos generales como “la altura” de una nota. Esto es fácil de ver en una partitura porque mientras más alta se encuentra en relación al pentagrama, más aguda es. De lo contrario, mientras más baja, más grave. También puedes verlo en el piano, las notas más graves se encuentran a la izquierda y las más altas a la derecha, todas las teclas se encuentran en orden de afinación. En la música clásica de nuestro sistema occidental tenemos notas asignadas por afinación y poseen un nombre (do, re, mi, fa, sol, la, si).
Intervalo
Es la distancia entre una nota y otra. La unidad musical para medir un intervalo es el “tono”. También tenemos el “semitono”, que como lo indica su nombre, es la mitad de un tono.
Escala musical
La escala musical se refiere a una sucesión de notas. Cuando colocamos una serie de notas de distinta afinación que asciende o desciende, con distancias determinadas entre una y otra, estamos formando una escala.
Qué son las alteraciones musicales
Por fin hemos llegado a lo que nos interesa de este artículo. Ya sabiendo los conceptos anteriores podrás comprenderlo mejor. Las alteraciones sirven para cambiar la afinación de una nota. Las más comunes son:
El sostenido
Alteran una nota medio tono de manera ascendente.
El bemol
Alteran una nota medio tono de manera descendente.
El becuadro
Cancelan el efecto de una nota que ya se encuentra alterada, es decir, vuelve “a la normalidad”.
También existen otras alteraciones aunque no se usan frecuentemente por practicidad, como el doble sostenido y el doble bemol. También existieron otras alteraciones en tiempos antiguos que ya no utilizamos en la música occidental. Estas son: el medio sostenido, medio bemol, sostenido y medio, bemol y medio.
Características de las alteraciones musicales
En la mayoría de los casos las canciones, piezas u obras musicales han sido compuestas dentro de un contexto musical, una estructura que le da forma a la música para que podamos comprenderla. Esta estructura se basa en reglas de armonía y es, en resumen, lo que hace que las notas sean agradables al oído.
Cuando la afinación de una nota se sale de este contexto, esa nota nos resulta extraña porque no es compatible con el resto, a esto le llamamos “disonancia”. La disonancia no es necesariamente desagradable (de hecho se utiliza mucho en géneros como el jazz), pero debe utilizarse con cautela porque puede traer mucha inestabilidad musical y despistar a un público que no esté acostumbrado a ello.
Para qué sirven las alteraciones musicales
Las alteraciones son la herramienta que nos permite que las notas permanezcan dentro de esta estructura, o bien, que la rompan si es el efecto que queremos lograr. Para entender esto con más profundidad debemos hablar del concepto de la tonalidad.
La tonalidad musical es lo que define la melodía y los acordes de una canción o de una obra. Podría decirse que al componer o al improvisar, sabemos qué notas podemos utilizar dependiendo de la tonalidad. La forma en que sabemos la tonalidad de una composición es por medio de la armadura, que es un grupo de sostenidos o de bemoles que se encuentran al principio del pentagrama.
Cada tonalidad está definida por un grupo específico de alteraciones y dependen de la escala musical de origen. Por ejemplo, la tonalidad de Sol mayor, tiene 1 sostenido en la nota fa. Otro ejemplo: La tonalidad de Si bemol mayor tiene 2 bemoles (uno en la nota si y otro en la nota mi).
Cuando tenemos una armadura escrita al principio del pentagrama, esto significa que estas alteraciones continúan el resto de la obra, a menos que la armadura (o tonalidad) cambie o que se produzcan alteraciones individuales.
Cómo se escriben las alteraciones musicales
Las alteraciones se colocan siempre del lado izquierdo de la nota que queremos alterar y debe respetar el espacio o línea en la que ésta se encuentra. Por ejemplo, si queremos convertir un fa en fa sostenido, debemos colocar el símbolo de sostenido en la quinta línea del pentagrama, que es el sitio asignado para la nota fa.
En el caso de las armaduras, el grupo de alteraciones de la tonalidad deseada se coloca al principio del pentagrama, sin necesidad de colocar ninguna nota y poseen un orden específico.
- Para sostenidos: fa, do, sol, re, la, mi, si.
- Para bemoles: si, mi, la, re, sol, do, fa.
Ahora que veas estos símbolos en una partitura ya podrás reconocerlos y te darás cuenta de que te has acercado un poco más a comprender el fascinante lenguaje de la música.
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