Características del estado sólido

Para comenzar, vamos a ver qué es el estado sólido. Como se menciona anteriormente, este es uno de los 4 estados de la materia.

Si miras a tu alrededor, podrás ver que la mayoría de los objetos que te rodean se encuentran en estado sólido, por ejemplo: un libro, una mesa, una pelota, una piedra, un árbol. Todos estos objetos tienen ciertas características en común, poseen una forma definida y no cambian cuando los tocas o manipulas. Esto sucede porque en este estado las partículas que forman la materia se encuentran muy juntas y poseen una estructura organizada. Las partículas o átomos en el estado sólido, vibran en su lugar, no se dispersan, es debido a esto que los sólidos poseen forma propia y volumen definido. Esto significa que mantienen su forma y ocupan un sitio definido en un espacio.

Veámoslo en más detalle… El estado sólido se caracteriza por tener volumen y forma definida. Las fuerzas de atracción que existen entre las partículas son muy fuertes, por lo que no tienden a desplazarse, presentan un movimiento de vibración, pero es fijo, por lo que son rígidos, a diferencia de lo que sucede en el estado líquido o gaseoso, en los cuales las partículas presentan más movimientos y están más separadas. Los sólidos tienen formas propias y son incomprensibles.

Tipos de sólidos

Los sólidos a su vez se pueden clasificar según la disposición de sus moléculas en sólidos cristalinos y sólidos amorfos:

• Los cristalinos presentan una estructura ordenada formando lo que conocemos como cristales, por ejemplo: la sal de mesa.
• En cambio, los amorfos tienen una estructura desordenada, es decir, sus moléculas están dispuestas al azar, por ejemplo: el vidrio, aunque pareciera indicar lo contrario. Tanto el cuarzo como el vidrio están compuestos por un elevado contenido de silicatos, pero el cuarzo es un sólido cristalino a diferencia del vidrio.

Los sólidos además cuentan con otras características, generalmente son más densos que los líquidos y los gases. Algunos sólidos pueden ser transparentes, como el vidrio, u opacos, como una piedra.

Veamos algunas de las características del estado sólido:

1. Estructura y organización: Como se mencionó antes, las partículas en estado sólido están estrechamente unidas y ordenadas, formando una estructura regular. Esto le otorga forma y volumen definido para los objetos en estado sólido.
2. Cercanía de partículas: Cuando hablamos de partículas nos referimos a los átomos, moléculas o iones que conforman un material. En el estado sólido, estas partículas se encuentran muy cercanas unas de otras y se mantienen fijas en una posición. Aunque las partículas tienen la capacidad de vibrar en su lugar, no se mueven.
3. Resistencia y rigidez: Es la capacidad de resistencia a sufrir deformaciones bajo la aplicación de una fuerza externa. Los sólidos pueden cambiar de forma solo si es vencida su resistencia. No se deforman fácilmente y requieren una cantidad significativa de fuerza para cambiar su forma o vencer su resistencia. Por ejemplo, una barra de acero es más rígida que una tabla de madera.
4. Densidad alta: A diferencia de los líquidos y gases, presentan una alta densidad. Esto quiere decir que hay mayor cantidad de partículas o mayor cantidad de masa por unidad de volumen.
5. Elasticidad: es la medida de resistencia del material a la deformación elástica. Algunos sólidos tienen la capacidad de sufrir una deformación temporal mediante la acción de una fuerza y luego volver a la forma original cuando termina dicha acción de fuerza.
6. Dureza y fragilidad: varía dependiendo de su composición. Es la fortaleza física que presenta un sólido, es decir, es la resistencia que presenta al ser sometido a una fuerza específica. Un sólido es frágil cuando se rompe fácilmente sin deformarse y un sólido es duro cuando es difícil rallar su superficie. Por ejemplo el sólido que se conoce que presenta mayor dureza es el diamante y el de menor dureza, es decir el mas blando, es el talco.
7. Punto de fusión y de ebullición: Esta característica se relaciona con los cambios de estado de la materia. El punto de fusión, es la temperatura en la que un material sólido puede pasar a líquido. También poseen punto de ebullición, que es la temperatura en la que el sólido puede convertirse en gas. Por ejemplo: los sólidos cristalinos funden a una cierta temperatura, pasando a cristales líquidos. En cambio, los sólidos amorfos no poseen punto de fusión definido.

Todas estas características del estado sólido son las que lo diferencian del estado líquido y gaseoso.

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