Partes del ojo y sus funciones - Para niños

El ojo es nuestro órgano de la visión y está compuesto por varias partes: los párpados, los globos oculares, el aparato lagrimal y los músculos que mueven el ojo. Se puede dividir en tres capas principales: la externa, la media y la interna.

La capa externa del ojo:

• La órbita
• La esclera
• La conjuntiva
• El aparato lagrimal
• Glándula lagrimal
• Glándula de Meibomio
• Conducto lagrimal
• La córnea

La capa media del ojo:

• Cristalino
• Cuerpo ciliar
• El iris
• La pupila
• Humor vítreo

La capa interna del ojo:

• La retina
• La mácula
• Retina periférica
• Nervio óptico

A continuación, vamos a explicarte cuál es la función de cada una de las partes del ojo que te hemos mencionado en el apartado anterior:

• La órbita: El ojo se sitúa en una cavidad ósea conocida como órbita, formada por siete huesos. Esta cavidad protege el ojo y contiene seis músculos extraoculares que permiten que el ojo se mueva en diferentes direcciones.
• La esclera: Los músculos extraoculares se insertan en la esclera, la parte blanca del ojo. La esclera es una capa gruesa y resistente que cubre casi toda la superficie del globo ocular.
• La conjuntiva: Tanto la esclera como el interior de los párpados están recubiertos por la conjuntiva, una membrana mucosa transparente que protege la esclera y mantiene el ojo lubricado.
• El aparato lagrimal: Las lágrimas, que tienen la función de lubricar el ojo, están compuestas por tres capas: una lipídica (grasa), una acuosa (agua) y una mucosa (moco).
• Glándula lagrimal: Se encuentra situada bajo el borde externo de la ceja y produce la parte acuosa de las lágrimas, manteniendo la córnea hidratada.
• Glándula de Meibomio: Está localizada en los bordes de los párpados y produce la parte grasa de las lágrimas para evitar su evaporación rápida.
• Conducto lagrimal: Es el canal por donde las lágrimas se drenan hacia la nariz.
• La córnea: Es la parte frontal y transparente del ojo que cubre el iris. Actúa como una lente que permite el paso de la luz y contribuye a enfocar las imágenes.
• Cristalino: Detrás de la córnea se encuentra el cristalino, que funciona como una lente biconvexa para enfocar las imágenes en la retina. Ajusta su forma para enfocar objetos a diferentes distancias y también ayuda a proteger la retina de la radiación UV.
• Cuerpo ciliar: Este cuerpo está formado por el músculo ciliar y los procesos ciliares. Está conectado al iris y produce el humor acuoso, un líquido que nutre y oxigena la córnea y el cristalino, y también ajusta la forma del cristalino para enfocar correctamente.
• El iris: Es la parte de color del ojo, que regula la cantidad de luz que entra a través de la pupila, ajustando su tamaño para controlar la entrada de luz.
• La pupila: Es el orificio en el centro del iris. Su tamaño cambia en respuesta a la cantidad de luz que recibe: se contrae con mucha luz y se dilata con poca luz.
• Humor vítreo: Es un gel incoloro que llena el interior del ojo, manteniendo su forma.
• La retina: Es la capa sensible a la luz en la parte posterior del ojo. Contiene los fotorreceptores que convierten la luz en impulsos eléctricos enviados al cerebro. Hay dos tipos de fotorreceptores: los bastoncillos, que permiten ver en blanco y negro y en condiciones de poca luz, y los conos, que perciben los colores.
• La mácula: Es una pequeña área amarillenta en la retina que proporciona una visión central detallada y permite ver pequeños detalles y movimientos.
• Retina periférica: La parte de la retina que se encarga de la visión periférica o lateral, ayudándonos a ver lo que está a nuestro alrededor.
• Nervio óptico: Es el nervio más grande del ojo y está formado por millones de fibras nerviosas que transmiten los impulsos eléctricos desde la retina hasta el cerebro, donde se procesa la información visual.

Descubre aquí la anatomía del ojo humano.

La forma del ojo es esférica y tiene en torno a unos 2,5 centímetros de diámetro. Por la acción de seis músculos, dos oblicuos y cuatro rectos, se mueve y está protegido exteriormente por los párpados y las pestañas.

Además, está formado por tres capas concéntricas:

• La esclerótica o túnica fibrosa
• El coroides o túnica vascular
• Y la retina o túnica nerviosa

También existen una serie de medios transparentes y refrigerantes, entre los que destaca la córnea, el cristalino, el humor acuoso y el humor vítreo.

Imagen: Slideshare

Comenzamos analizando partes del ojo y sus funciones para hablar de la capa esclerótica. Es la membrana firme que forma la capa exterior del ojo, también conocida como túnica fibrosa. Es muy resistente y la compone tejido conectivo-fibroso que preserva el interior del ojo y le da rigidez.

Tiene como función proteger las estructuras sensitivas del ojo y dentro de ella podemos distinguir la cápsula de Tenon, que es una membrana resistente que recubre la esclerótica y que conforma la vaina de músculos del ojo, que sostiene a este y lo separa de la cavidad orbitaria.

La túnica vascular o media, también conocida como coroides, es donde se sitúan los vasos sanguíneos de los que depende la retina. Se encuentra entre la esclerótica y la retina, y recubre el globo ocular por dentro, cuya cara externa es brillante y negra.

En la parte delantera, hay una perforación en el centro, la pupila, que está rodeada por el iris, membrana circular que tiene como función regular la luz que entra a través de la pupila, contrayéndose o dilatándose en función de la luminosidad. En la zona posterior del coroides se encuentra el nervio óptico.

Imagen: Slideshare

Dentro de las partes del ojo y sus funciones hablaremos también de la túnica nerviosa o retina que es la zona más interna del ojo, siendo una extensión del sistema nervioso central. En ella se origina el nervio óptico y funciona como una placa sensible a la luz.

Dentro de la misma se distinguen tres partes:

• La papila o disco óptico: es el sector de acceso del nervio óptico en la retina, entrando las arterias retinianas y saliendo las venas retinianas. Es el punto ciego del ojo porque no tiene células sensibles a la luz.
• Mácula: se encuentra situada detrás de la retina y por el gran número de foto-receptores y vasos sanguíneos que hay en ella se especializa en la visión fina, que sirve para percibir detalles de los objetos.
• Fóvea: es una pequeña depresión que se encuentra en el centro de la mácula, de 1,5 milímetros cuadrados, que permite la visión de mayor precisión y agudeza.

Continuamos con las partes del ojo y sus funciones analizando ahora los medios transparentes, que forman el sistema dióptrico, destacan:

• Cornea. Se encuentra situada en la zona anterior de la esclerótica y, como capa clara y transparente, deja pasar los rayos luminosos. Por su curvatura regular trabaja como una lente convergente, teniendo un radio de curvatura de unos 8 mm. Por lo tanto, tiene dos funciones: una óptica y otra de protección de la parte anterior del ojo.
• Cristalino. Esta lente biconvexa se sitúa detrás del iris y sirve para que se acomode el ojo, es decir, que enfoque de modo preciso. El cristalino está sujeto por el ligamento suspensor, también denominado zónula de Zinn, que lo adhiere a la túnica bascular. Pequeños músculos modifican su forma y lo hacen más curvo para enfocar los objetos cercanos y lo achatan para ver objetos distantes.
• Humor acuoso. Es un líquido fluido y transparente, formado en un 98% por agua, que se sitúa entre el cristalino y la córnea, en la zona anterior del ojo. Mantiene el globo ocular inflado y oxigena y nutre el cristalino y la córnea, ya que ambos no tienen aporte de sangre.
• Humor vítreo. También se le denomina cuerpo o gel vítreo, y lo forma una sustancia incolora y gelatinosa, que llena la parte posterior del globo ocular, entre el cristalino y la retina. Mantiene la forma del ojo y su presión interna, y se forma durante la vida embrionaria, por lo que no se renueva. Tiene como función mantener la forma del globo ocular y lograr una superficie de la retina uniforme, para que se puedan recibir imágenes nítidas.

Dentro de las partes del ojo y sus funciones es importante describir cómo actúa la luz en este órgano. Esta entra a través de la pupila y se concentra en la córnea y el cristalino, para formar una imagen en la retina. Hay que tener en cuenta que la retina tiene millones de células, denominadas bastones y conos, que son sensibles a la luz.

Los conos requieren luz brillante para funcionar y detectan muchos tonos de color. Por su parte, los bastones necesitan poca luz y distinguen poco los colores, siendo asignados para la visión con oscuridad.

Las excitaciones nerviosas que se producen en la retina se transmiten por los nervios ópticos de ambos ojos en forma de impulsos nerviosos hasta la corteza cerebral, donde tienen lugar los estímulos de las percepciones y sensaciones visuales. La información de los nervios ópticos se procesa en el cerebro y da lugar a una imagen coordinada.

El ojo humano funciona de manera parecida a una cámara fotográfica, pero con una capacidad de resolución mucho mayor. El proceso de visión comienza cuando la luz que se refleja en los objetos entra por la pupila y llega a la retina. En la retina, la luz se convierte en impulsos eléctricos que el cerebro interpreta para formar una imagen.

La clave para entender cómo vemos se basa en la refracción de la luz. La refracción ocurre cuando la luz cambia de dirección al pasar de un medio a otro. En el ojo, esto sucede cuando los rayos de luz atraviesan la córnea y el cristalino.

El ojo tiene varias defensas naturales que lo protegen de posibles daños. Aquí te explicamos cuáles son y cómo funcionan:

• Las pestañas: Son unos pequeños pelos duros que están ubicados en los bordes de los párpados y que actúan como una primera línea de defensa. Las pestañas superiores son más largas y se curvan hacia arriba, mientras que las inferiores se curvan hacia abajo. Su función principal es evitar que los insectos y las partículas de polvo entren en el ojo. Además, al detectar cualquier estímulo, las pestañas desencadenan un parpadeo reflejo que ayuda a proteger el ojo.
• Los párpados: Los párpados superior e inferior son finas capas de piel y músculo que cubren el ojo. Se cierran de manera rápida y automática (parpadeo) para formar una barrera que protege el ojo de objetos extraños, viento, polvo y luz intensa. Este parpadeo se activa cuando algo se acerca al ojo, toca su superficie o al sentir partículas en el aire.
• La membrana conjuntiva: Esta membrana transparente recubre la superficie interna de los párpados y se extiende para cubrir la parte frontal del globo ocular, hasta el borde de la córnea. La conjuntiva protege los tejidos delicados que se encuentran debajo de ella y ayuda a mantener el ojo en buen estado.

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