Qué fueron las Cortes de Cádiz

Las Cortes de Cádiz fueron una asamblea constituyente y legislativa creada para llenar el vacío de poder español causado por la ocupación de España por parte de Napoleón durante 1810. Estas Cortes se reunieron entre los años 1810 y 1814, sirviendo como muestra de patriotismo y de rechazo a la ocupación francesa.

Las Cortes de Cádiz fueron convocadas por la Junta Suprema Central de Sevilla, la cual negaba la soberanía del rey José I, impuesto por su hermano Napoleón. A la Junta Central de Sevilla le sustituyó el Consejo de Regencia de España e Indias como órgano de gobierno, siendo la encargada de crear las Cortes.

Las Cortes de Cádiz se ocuparon de muchas reformas, pero la principal fue la creación de la constitución liberal que creaba los primeros derechos de esta clase para la sociedad española. Por ello podemos decir que la constitución de las Cortes de Cádiz es uno de los eventos más importantes de nuestra historia.

A comienzos del siglo XIX, Europa se encontraba en una situación de conflicto, ya que el emperador francés Napoleón Bonaparte, buscaba conquistar toda Europa para llevar sus ideas liberales a todos los lugares. En esta situación, Napoleón buscó el apoyo de los españoles para enfrentarse a los ingleses, encontrándolo en el rey Carlos IV, que dejó entrar a las tropas francesas a España, esperando que atacaran Portugal, siendo esta la gran alianza de Reino Unido. Lo que no esperaba Carlos es que estas tropas tomaran España a la fuerza.

En marzo de 1808, tuvo lugar el motín de Aranjuez, forzando la abdicación del rey Carlos IV, y permitiendo la llegada al trono de Fernando VII. Viendo esto, Napoleón pensó que la corona española estaba en grave crisis, y que no era unos buenos aliados. Napoleón obligó a Fernando VII a abdicar en su padre, y tras ello Carlos IV tuvo que abdicar en Napoleón. Estos episodios conocidos como las abdicaciones de Bayona, terminaron con la coronación como rey de España del hermano de Napoleón, José Bonaparte, también conocido como José I.

Los españoles decidieron no obedecer a José I, ya que consideraban que era una autoridad no legítima, incluso poniéndole un apodo hiriente como fue el de "Pepe Botella". En esa situación tiene comienzo la Guerra de Independencia, donde los españoles se enfrentaron contra los franceses para terminar con la invasión, organizándose en las conocidas juntas locales.

Imagen: Blog de historia de España

En 1810 tuvo lugar la primera convocatoria de las Cortes de Cádiz, siendo convocadas por la Junta Central. La nación española se había llenado de juntas locales y provinciales que intentaban llenar el vacío de poder, y todas ellas se centralizaban en la Junta Central. Por ello, a la hora de convocar las Cortes de Cádiz, cada una de las juntas eligió a unos representantes, que serían los encargados de representar a cada provincia en las Cortes convocadas.

A la hora de convocar las Cortes, la mayor parte de los diputados elegidos eran burgueses, ya que eran los más cercanos a las ideas liberales, al ser los más beneficiados por estas. Los burgueses contaban con estudios, conocían las ideas liberales, y tenían mayor tiempo que el resto de trabajadores, siendo por ello los ideales para representar a la población en las Cortes.

de las Cortes de Cádiz, teniendo lugar en la llamada isla de León. Aun con ello, las reuniones de las Cortes con el paso pasaron a la ciudad de Cádiz, aunque iba cambiando dependiendo de los posibles ataques que sufriera la ciudad por parte de los franceses.

En las primeras reuniones de las Cortes de Cádiz se declararon varios de los principales elementos que deberían caracterizar aquellas reuniones. Se consideraba que las Cortes eran las que representaban y controlaban la soberanía nacimiento, hasta la vuelta del rey Fernando VII, al que consideraban un rey legítimo. Las Cortes reconocían la separación de poderes, diciendo que ellos serían los representantes del poder legislativo, mientras que el rey ocuparía el poder ejecutivo cuando pudiera volver.

Las primeras sesiones de las Cortes sirvieron para sentar dos importantes bases:

• Que el rey Fernando VII seguiría siendo el monarca,
• Que las Cortes debían tener mayor poder que antes de la guerra.

La idea era ir hacia un sistema mixto, o lo que conocemos actualmente como monarquía parlamentaria.

Imagen: Slideshare

Las Cortes de Cádiz aprovecharon el tiempo, y en un periodo corto fueron capaces de sacar una gran cantidad de reformas. La idea era conseguir importantes avances, y lograr derechos que aún no se tenían.

Debemos tener en cuenta que no todos los miembros de las Cortes contaban con los mismos pensamientos, pudiendo encontrar diversas clases de diputados:

• Por una parte estaban los llamados liberales, que defendían las ideas de la Revolución Francesa y buscaban reformas revolucionarias.
• Luego estaban los moderados, que buscaban reformas que crearan una división de poderes entre el rey y las Cortes.
• Por último, estaban los absolutistas, que buscaban mantener la monarquía absoluta y la sociedad estamental, no queriendo cambios de ninguna clase.

Con el paso del tiempo, los liberales fueron los grandes vencedores, en lo que se suele considerar la primera revolución liberal de España. Los liberales buscaron terminar con toda clase de absolutismo, y aprobar una Constitución que permitiera no ir hacia atrás. Aún con esto tuvieron que negociar los los diputados de otros bandos, por lo que los resultados tuvieron elementos de los 3 grupos de personas.

Entre las primeras reformas de las Cortes de Cádiz podemos encontrar:

• Abolición del régimen señorial
• Eliminación de la Inquisición Española
• El final de los premios
• La desamortización de gran parte de los bienes religiosos.

Muchos de estos elementos ocurrían por primera vez en territorio español, aunque ya habían tenido presencia en otras regiones europeas con procesos liberales.

Sin lugar a dudas, el elemento más importante de las Cortes de Cádiz fue la creación de la Constitución Española de 1812, siendo conocida como la Pepa por haberse aprobado en San José, y que es considerada como la primera Constitución en la historia de España.

La Constitución de 1812 fue promulgada el 19 de marzo de 1812, en unos momentos en los que España aún estaba bajo dominio de los franceses. Fue aprobada por representantes de todas las provincias, aunque los estados americanos tuvieron menos participación por la complejidad de la lejanía respecto a la península.

Características de la Constitución de 1812

La Constitución de 1812 es la primera norma de esta clase en la historia de España, y por ello cuenta con una serie de características muy importantes para entender la relevancia que tuvo. Por ello algunas de las principales características de la Constitución de 1812 son las siguientes:

• Habla por primera vez de la soberanía de la nación por parte del pueblo español. Para muchos historiadores es aquí cuando nace el concepto de España como nación.
• Reconoce la nacionalidad a todos los españoles, tanto a los que vivían en la Península Ibérica, como a todos los que habitaban las colonias españolas en territorio americano. La pérdida de estos elementos poco después es en parte lo que considera que inició los procesos independistas de las naciones latinoamericanas.
• Se habla por primera vez de una serie de libertades individuales, políticas y civiles que todos los españoles deben tener. Con el paso de los meses se fueron afianzando importantes derechos como la libertad de prensa, que hoy en día vemos como algo básico, pero que hasta aquel momento no se contemplaba como un derecho.
• Se anunciaba por primera vez la separación de poderes, por lo que el rey dejaba de ser absoluto y centralizar todo el estado en su figura. La idea era pasar a una especie de monarquía parlamentaria, en la que el rey tendría el poder ejecutivo, mientras que las Cortes conservaría el poder legislativo.
• Se reconoció la figura del rey por la gracia de Dios, pero este dejaba de tener todo el poder, siendo una figura más de la política española. Esto se considera que fue una petición de los absolutistas, que aún con cambios, querían que se mantuviera la idea del origen divino del rey.

Imagen: Daniel y los quince

Para continuar esta lección sobre las Cortes de Cádiz, debemos hablar sobre la disolución de estas, para así comprender cómo fue el final de una de las organizaciones más importantes en la historia española.

En 1813, las tropas de Napoleón comenzaron a retroceder por la presión de los españoles, los cuales llevaban tiempo usando estrategias de guerrillas para frenar la superioridad francesa. A finales de año, y tras numerosas derrotas en varios frentes, Napoleón propuso la vuelta de Fernando VII al trono español a cambio de paz.

En marzo de 1814 el rey Fernando fue liberado por los franceses y retornó a España, siendo recibido por júbilo por los españoles liberales. En un primer momento, el monarca prometió mantener lo dicho en la Constitución, pero dos meses después de su llegada (y en parte por el manifiesto de 70 diputados absolutistas) anuló la Constitución de 1812. Junto a esta anulación también tuvo lugar la disolución de las Cortes, el encarcelamiento de los liberales revolucionarios y la vuelta al absolutismo. Siendo por esto el final de las Cortes de Cádiz.

Todo este acto de Fernando VII para recuperar el poder tuvo lugar en mayo de 1814 con la publicación del Decreto de Valencia. En este decreto el rey proclamó su origen divino, y renunciaba todas las acciones de las Cortes de Cádiz como un intento de golpe de estado para tomar el poder. Fue con este decreto que se anuló la Constitución de 1812, y gran parte de las leyes de las Cortes de Cádiz.

Aún así, la influencia de las Cortes de Cádiz se mantuvo mucho tiempo después de su disolución, y por ello muchas de sus reformas volvieron con el paso del tiempo, marcando el camino para los siguientes revolucionarios.

Se podría decir que con las Cortes de Cádiz nació tanto la soberanía nacional como la democracia española.

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