Rusia en la Segunda Guerra Mundial - resumen

Poco antes de la Segunda Guerra Mundial, la URSS se encontraba en una situación complicada. No habían pasado muchos años de la revolución rusa que había acabado con el sistema tradicional de la nación y, por ello, la nación aún se encontraba en un proceso de transformación.

En este sentido, aunque la URSS se encontraba en guerra con pequeñas naciones, debido a la intención de expandir el socialismo a países con quien guardaba relación, no se encontraba preparada para una gran guerra global.

El Pacto Ribbentrop-Molotov

Por todo esto el 23 de agosto de 1939, pocos días antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial, Stalin firmó un pacto con la Alemania de Hitler, conocido como el Pacto Ribbentrop-Molotov.

En el acuerdo se prometía por ambas partes el no atacarse durante algunos años, sirviendo para que ambas naciones pudieran tomar las regiones que querían, pero siempre que no hubiera choque de intereses, siendo para ambas potencias mucho más sencillo.

Por parte de la URSS, se pensaba que Alemania era un rival muy fuerte y sobre el que no se tenían intereses conquistadores, mientras que por parte de la Alemania se consideraba que enfrentarse a Francia y la URSS al mismo tiempo haría que el país germano estuviera rodeado. En el pacto se acordaron los territorios que cada nación podía tomar, dividiendo parte de Europa entre la URSS y Alemania.

Aún con esto, los rusos y los alemanes nunca fueron aliados, ya que la URSS se negaba a entrar en la Segunda Guerra Mundial, y Hitler que odiaba a los comunistas no quería unirse a ellos.

La ruptura del pacto

El 1 de septiembre de 1939 Alemania atacó Polonia iniciando la Segunda Guerra Mundial, y poco después la URSS iniciaba la invasión y conquista de numerosas zonas de Europa del Este, siempre respetando los puntos del acuerdo firmado entre ambas potencias.

Cuando la guerra estaba más avanzada y Hitler pensaba que la victoria era cuestión de tiempo una vez conquistada Francia, el líder nazi ordenó atacar a la URSS, ya que en esa situación consideraba que podían vencer al gigante ruso, siendo la razón de su ataque el odio de Hitler hacia los eslavos y los comunistas. El 22 de junio de 1941 Alemania entró en suelo ruso, iniciando la llamada Operación Barbarroja y causando la entrada rusa en la guerra.

Tras la invasión alemana a la URSS, la nación rusa acercó posturas con las grandes potencias Aliadas, firmando numerosos acuerdos de colaboración con Reino Unido, Estados Unidos y otros pequeños países aliados. Se podría decir que en este momento la URSS entra en la Segunda Guerra Mundial, aunque tardaría algún tiempo en unirse de forma oficial.

La idea de Hitler era conquistar la URSS rápidamente, al igual que había hecho con Francia, pero el ataque relámpago no funcionó, ya que las tropas de la URSS estaban mejor preparadas que las francesas y la extensión de la tierra era mucho mayor.

La ayuda económica llegada desde Estados Unidos sirvió a la URSS para comprar suministros y armamento, deteniendo a los alemanes hasta la llegada del duro invierno ruso, cuando los nazis tuvieron que detener el avance por la imposibilidad de mantenerlo.

Durante años, los rusos fueron capaces de detener los ataques alemanes, deteniéndose en batallas como la de Stalingrado y Kursk, e incluso recuperando terrenos con victorias como Vístula-Oder. Todo esto hizo que la URSS fuera la nación con mayor número de victorias en la Segunda Guerra Mundial, y la que más muertes provocó en el bando alemán.

Tras estas victorias, la URSS inició una enorme contraofensiva contra los alemanes, llegando hasta las zonas bálticas y ocasionando que los alemanes se encontrarán rodeados por los rusos y el resto de Aliados. A finales de 1943, los Aliados se reunieron en Teherán y acordaron los movimientos para finalizar la guerra y el futuro de Europa tras ella.

El 2 de mayo de 1945 Berlín fue tomada por los Aliados, siendo la URSS la primera potencia en entrar en la ciudad y demostrando con ello que fueron una de las potencias más importantes en la guerra.

Para concluir este resumen de Rusia en la Segunda Guerra Mundial, debemos hablar sobre cómo fue el final del conflicto para la URSS y cuáles fueron las consecuencias que trajo para el país.

Aunque la URSS ganó la guerra, no todo fueron beneficios para la nación europea, ya que la guerra trajo graves consecuencias en la demografía y economía, siendo la nación con el mayor número de muertos durante la guerra. Esto fue aún más grave debido a que fue una de las pocas potencias aliadas que no recibió dinero de Estados Unidos, por lo que su recuperación tuvo que ser propia.

Son muchos los elementos a tener en cuenta sobre la URSS tras la guerra, afectando a todos los ámbitos de la nación. Las principales consecuencias que trajo la guerra al país soviético fueron las siguientes:

• La URSS fue la primera nación en entrar en Berlín, por lo que podríamos decir que fue la que terminó la guerra. Aun así se tiende a olvidar su participación vital y centrar el mensaje de victoria en EEUU o Reino Unido.
• La URSS, al igual que hizo Estados Unidos con occidente, ayudó a salvar la economía de las naciones del Este de Europa y de China. Por ello formaron un bloque común caracterizado por el socialismo.
• Rusia se volvió la gran potencia mundial junto a Estados Unidos, causando un enfrentamiento ideológico entre ambas potencias que iniciaría la Guerra Fría y, por lo tanto, la lucha entre capitalismo y comunismo.
• Temiendo que algo semejante volviera a pasar, la URSS inició una enorme financiación de armamento, especialmente centrada en la creación de armas nucleares.
• Por su victoria, la URSS tomó numerosos territorios, entre los que encontramos Lituania, Estonia, Letonia y partes de Polonia, Finlandia y Rumania.
• La URSS junto al resto de los Aliados se dividieron Alemania, causando que parte de esta tuviera influencia socialista y causando la división de la nación germana durante años.

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