El libro de los muertos de Egipto: resumen

El Libro de los muertos es el nombre moderno que se ha dado al texto funerario del Antiguo Egipto, siendo aquel libro que mostraba los ritos funerarios que se debían realizar según las creencias egipcias. El Libro de los muertos comenzó a utilizarse durante el Imperio Nuevo, y se mantuvo hasta la llegada de la cultura helenística a Egipto.

Se considera que este libro guarda los elementos funerarios escritos en pirámides y sarcófagos, antes incluso de que se escribiera en papiro. La mayor parte de los elementos del libro provienen de esta época, pero también conocemos otras fórmulas mágicas que aparecieron más tarde, sobre el Tercer periodo intermedio. Aún así muchos de los textos originales se mantuvieron escribiendo en las paredes de las pirámides, y un ejemplar del libro era enterrado junto a los fallecidos.

El Libro de los muertos de Egipto no era llamado así originalmente, sino que tenía otra traducción en lengua egipcia, siendo más semejante a Libro de la salida al día o Libro de la emergencia a la luz. En general, el texto constaba de una serie de hechizos para poder superar el juicio de Osiris, permitiendo llegar hasta el inframundo y el paraíso.

Debemos tener en cuenta que no existía una sola versión del Libro de los muertos, sino que cada texto era único al contar con hechizos e ilustraciones propias. Por ello, los historiadores piensan que pudo ser que cada persona selecciona una serie de hechizos, dependiendo de lo que consideraran más importante para pasar al otro lado.

El Libro de los muertos no fue siempre igual, sino que tuvo una evolución a lo largo de los años, gracias al cual al texto original se fueron añadiendo nuevos elementos para definir los ritos funerarios.

El Libro de los muertos se creó a partir de una tradición milenaria de textos funerarios, los cuales venían desde la época egipcia del Reino Antiguo. Los primeros textos funerarios fueron los llamados Textos de las Pirámides, los cuales aparecieron durante la V dinastía. Estos textos se encontraban en las paredes de las cámaras mortuorias de las pirámides, y tan solo eran usados por los faraones.

A finales del Reino Antiguo, los textos dejaron de ser exclusivos para la realeza, y los nobles comenzaron a usarlos en sus sarcófagos, dando inicio a los llamados Textos de los Sarcófagos. Estos textos comenzaron a ser utilizados durante el Reino Medio, estando marcados por hechizos y por primera vez ilustraciones.

No fue hasta el Primer Período Intermedio que todos estos textos se unieron para formar el Libro de los muertos original. En la dinastía XVII el libro ya era muy popular, y todas las personas con cierto dinero contaban con un ejemplar. En este punto, los hechizos ya estaban escritos en otros lugares, como en papiro o en los vendajes de las momias.

En el Imperio Nuevo, el libro logró su mayor extensión, con cientos de copias distintas, teniendo cada uno una serie de hechizos e ilustraciones distintas. Es por ello por lo que no existía una copia maestra o un modelo del Libro de los muertos, sino que cada persona podía tener una versión propia.

Ya en la dinastía XXXVI, el Libro de los muertos fue estandarizado, y comenzaron a surgir los textos iguales. Es este texto el que ha llegado a nuestros días, sirviendo de base y modelo para todo rito funerario egipcio.

Descubre aquí las diferentes etapas del Antiguo Egipto.

Para terminar este resumen del Libro de los muertos de Egipto debemos hablar sobre la utilidad que tenía este libro para la población egipcia, siendo clave para entender las razones de que fuera tan importante para sus ritos funerarios.

Los textos del Libro de los muertos contaban con una gran cantidad de propósitos, como por ejemplo identificarlos con dioses o darles maneras de superar el otro mundo. Algunas de estas maneras eran preservar el cuerpo del difunto, protegerse de fuerzas hostiles, o superar el ritual del pesaje del corazón.

Los textos e ilustraciones del libro narraban hazañas religiosas y mágicas, cuyo objetivo era controlar a los propios dioses. Debemos entender que la magia egipcia no tiene nada que ver con la que conocemos actualmente, sino que eran mecanismos escritos que ayudaban a relacionarse con los dioses.

Otro elemento clave del Libro de los muertos eran los talismanes y amuletos, los cuales contaban con hechizos del libro, y los fallecidos los llevaban ya que podían servir también en el más allá. Estos amuletos servían como hechizos portables, y les defendían de los peligros de las fuerzas hostiles del inframundo.

En general, podemos decir que todas las utilidades del Libro de los muertos se basaban en facilitar los ritos funerarios, siendo esto esencial para que los egipcios pudieran realizar todas aquellas tareas necesarias para pasar al otro lado.

Se pensaba que, tras morir, el corazón del fallecido era pesado con una pluma en una balanza, y el Libro de los muertos ayudaba a pasar este complicado tránsito.

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