Templo de Salomón: historia

El Templo de Salomón, también conocido como el Primer Templo, fue un templo bíblico que se cree que pudo existir en la ciudad de Jerusalén entre los siglos X y VI a.C. El final del templo tuvo lugar en el 587 a.C, cuando fue destruido por el rey babilónico Nabucodonosor II.

El Templo no era tan solo un edificio religioso, sino que también era utilizado como un punto de reunión para la población de Jerusalén. La idea es que fuera el centro de toda la religión, siendo donde las personas debían demostrar su adoración a las creencias.

Debemos entender que la existencia del Templo de Salomón no es del todo segura, ya que muchos estudiosos consideran que pudo no existir, siendo tan solo una leyenda narrada en la Biblia. Hoy en día, existen múltiples teorías sobre su existencia o no, pero con lo que sí contamos es con su historia bíblica.

Aquí te dejamos un repaso de los libros de la Biblia.

La historia del Templo de Salomón y su construcción vienen detalladas en el libro sagrado. Según la Biblia, las primeras piedras del Templo se colocaron el segundo mes del cuarto año del reinado de Salomón como rey de Israel. La finalización del templo por otra parte se hizo el octavo mes del undécimo año de reinado de Salomón, siendo por lo tanto una obra de unos 7 años.

Se dice que uno de los mayores ayudantes para la construcción del templo fue el rey de los tirios, Hiram I. Este monarca era amigo del rey David, y mantuvo una buena relación con su sucesor Salomón. Se dice que muchos barcos de los tirios llegaron con árboles hasta Israel, siendo de estos de donde Salomón pudo sacar la madera necesaria para la construcción de enormes monumentos. En agradecimiento, Salomón le daba recursos de Israel, siendo un claro ejemplo el aceite.

Tras la construcción del templo, y como agradecimiento a Hiram, Salomón entregó veinte ciudades cerca en el noroeste de Galilea a Hiram. Estas ciudades fueron llamadas las ciudades de la tierra de Cabul, y se dice que no agradaron a un Hiram que esperaba mayores fortunas por su ayuda. Aún así no tenemos constancia de que el enfado de Hiram provocara ningún conflicto armado, ya que las relaciones de ambos siguieron siendo buenas.

Uno de los eventos más importantes de la historia del templo tuvo lugar el séptimo mes del año, en la llamada fiesta de los Tabernáculos. Aquel día, los sacerdotes y los levitas llevaron al Arca del Alianza desde la ciudad de David hasta el sancta sanctorum del Templo de David, donde descansó hasta que años más tarde desapareció en circunstancias desconocidas.

Tras la colocación del Arca, el templo recibió la aprobación de Dios y, desde aquel momento, el lugar fue un lugar de rezo y adoración en la que todas las personas de Israel se podían reunir. Se dice que Salomón había cumplido una promesa a Dios con la construcción del templo, y desde aquel momento el lugar tenía la presencia de Dios.

Con el paso del año, el templo sufrió varios saqueos, los cuales se llevaron muchos elementos preciosos del lugar. Los distintos ataques que fue recibiendo la ciudad conllevaban que los enemigos robaran parte del templo, como forma de demostrar su victoria, y al mismo tiempo por las grandes riquezas con las que estaba decorado.

Algunos reyes, como por ejemplo Joás, intentaron mejorar el templo, reforzando o colocando nuevos elementos para intentar recuperar el poder que había tenido hasta aquel momento. Aún así el templo nunca pudo volver a la belleza de su origen.

Para terminar la historia del Templo de Salomón, debemos hablar sobre su final, ya que como muchos símbolos religiosos, fue destruido con el paso del tiempo por las grandes guerras que se sucedieron en la zona de Israel. Debemos tener en cuenta que esta destrucción es lo que cuentan los textos bíblicos, aunque la realidad es que muchos de estos eventos si que tienen sentido dentro de la historia de la región.

Según la Biblia, el Templo de Salomón fue saqueado por el rey Nabucodonosor del Imperio Neobabilónico cuando los babilonios atacaron el la ciudad de Jerusalén durante el reinado del rey Joaquín, un monarca muy débil que apenas pudo hacer nada para detener los ataques externos.

Una década más tarde, el rey Nabucodonosor volvió a atacar la ciudad de Jerusalén, y tras muchos años fue capaz de romper las murallas de la ciudad. El ejército babilónico entró en la ciudad y la tomó a la fuerza, y liderados por Nabuzadarán quemaron y demolieron la ciudad. Con este ataque, el Templo de Salomón fue totalmente destruido, no quedando nada.

Un tiempo después, en el año 516 a.C., se construyó el llamado Segundo Templo de Salomón en el mismo lugar donde estaba el Templo de Salomón, como una forma de sustituir lo que había sido. El Segundo Templo con el paso del tiempo también fue destruido, y se dice que ambos templos fueron destruidos el mismo día.

El Templo de Salomón ya no existe, pero su ubicación en la actualidad se encontraría en el territorio de Israel.

Te dejamos un mapa:

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