Gonzalo de Berceo: obras más destacadas

Nacido en Logroño hacia el año 1195, Gonzalo de Berceo fue clérigo en el monasterio de San Millán de la Cogolla (donde se ordenó sacerdote) y más tarde en Santo Domingo de Silos (Burgos). Es el primer representante del conocido como "mester de clerecía", una escuela medieval de hombres de letras cuya principal aportación fue el vocabulario más culto junto a la cultura latina al castellano y a las obras poéticas.

Inauguró lo que se conoce como la poesía erudita. Normalmente sus obras tratan de temas religiosos y estaban organizadas en una estructura muy marcada y bien definida (algo contrario a lo que se venía haciendo hasta el momento).

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Se trata de la primera obra de Berceo. Compuesta por 489 estrofas, se basó en la biografía de Emiliano o Millán, un santo que bautizó un monasterio con su mismo nombre. Sigue la estructura de las hagiografías, entendidas como descripciones de la vida de los santos, por lo que nos cuenta a qué dedicó Millán su carrera en la iglesia.

Se divide en tres partes donde aparecen narrados la conocida realización de dos milagros por parte del santo: el primero denominado como el milagro de las campanillas y el segundo como el milagro de la lluvia. La primera parte se ocupa de la vida del santo, la segunda de sus ya mencionados milagros y la última de su muerte y de los milagros realizados tras esta.

Composición poética centrada en la vida de Domingo de Silos, nacido en la Rioja igual que el autor y llegado al mundo alrededor del año 1000. Berceo sentía una profunda devoción por este santo y además estableció una conexión muy potente con él. Utilizó también, como en la obra mencionada anteriormente, una biografía sobre el santo para inspirarse en su obra.

La vida del santo se ve marcada por determinados eventos: a los 30 años se vuelve sacerdote, vive durante años en soledad debido a su decisión de alejarse de la sociedad y así posteriormente ingresar en el monasterio de San Millán y por último, al ingresar en este, se convirtió en un beato de gran influencia para la historia eclesiástica Riojana.

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Loores de Nuestra Señora es otra de las obras de Gonzalo de Berceo más importantes. Se trata de la primera obra mariana medieval (arte cristiano) de Berceo. En ella se relata de qué forma la imagen de la virgen María ha influido en los acontecimientos del mundo y de la historia de la humanidad.

Es un poema estructurado en tres partes y se cree que es la sexta obra de todas las composiciones de Berceo y por ello, una de las más maduras. La primera parte relata la incidencia de María en la salvación del mundo, la segunda habla los acontecimientos más importantes para ella y la vida de Jesús y la tercera es una parte llena de elogios a la tan admirada por Berceo, Virgen María. Es todo un clásico de la época medieval.

Obra compuesta por 210 estrofas donde se explica el proceso de reconocimiento, aceptación y resignación que tuvo que vivir la Virgen María cuando falleció su hijo Jesús. El proceso es doloroso y por tanto se trata de una obra dramática donde al principio encontramos una conversación entre la virgen y el santo, para que sea ella después la que continúa la explicación. Se trata de una obra innovadora que cambia la forma de narrar a la que Berceo tenía acostumbrados a sus lectores.

Hacia el final es cuando el autor retoma su habitual pluma y le añade sus toques más personales. Se ha hablado de este poema como uno de los más intensos riojanos debido a la gran cantidad de sentimientos que se manifiestan en él. Las pasiones están más presentes que nunca en la trayectoria de Gonzalo de Berceo. De nuevo, su admiración por la figura de la Virgen María le inspiró y le ha hecho alcanzar gran reconocimiento actual por su trabajo poético en la época medieval.

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