Tipos de perspectiva en una pintura
La perspectiva ha sido sin lugar a dudas uno de los estudios más perseguidos por los artistas a lo largo de la historia y será en el Renacimiento cuando esas investigaciones alcancen su momento culmen. El objetivo principal de esta es crear sensación de profundidad en la pintura, por lo tanto, la perspectiva lo que nos permite es plasmar las tres dimensiones (ancho, alto y profundo) en una superficie que por naturaleza es bidimensional. A continuación, en esta lección de unPROFESOR vamos a ver cuáles son los diferentes tipos de perspectivas en una pintura, así como las diferentes técnicas que se utilizan para su plasmación.
¿Qué tipos de perspectiva se aplica en la pintura?
Dentro de los tipos de perspectiva que se aplican en pintura se destacan las siguientes.
Perspectiva jerárquica
La perspectiva jerárquica es aquella que presenta los objetos y figuras ordenados por alturas o tamaños para mostrar cuál es la importancia de cada uno. Una perspectiva que permite al espectador fijar su atención en determinados aspectos, llegándose incluso a distorsionar tamaños y proporciones.
Este tipo de perspectiva se emplea desde antiguo y que siguen utilizando muchos artistas aún hoy por el toque naif que aporta a las composiciones. Hay muchos ejemplos de este tipo de perspectiva, siendo muy común en pinturas de épocas prehistóricas, Egipto u otras culturas antiguas.
Perspectiva axonométrica
Este sistema consiste en representar los diferentes elementos en un único plano. La perspectiva axonométrica emplea la proyección paralela o cilíndrica para conseguir que los volúmenes representados conserven sus proporciones en cualquiera de sus dimensiones en el espacio: altura, anchura y longitud.
La escala de los objetos representados no va en función de la distancia a la que se ubique el observador.
Dentro de la perspectiva axonométrica podemos encontrar otros tipos como:
- Perspectiva ortogonal: una perspectiva en la que las coordenadas coinciden con la proyección real de los ejes de las coordenadas del objeto.
- La perspectiva isométrica: idónea para la representación de objetos tridimensionales al proyectar sus ejes ortogonales principales formando ángulos de 120º.
- La perspectiva dimétrica: muy útil para representar volúmenes, especialmente objetos con más largura que anchura o altura.
- Perspectiva trimética: se emplea este tipo de perspectiva para representar objetos inclinados con respecto al plano del cuadro. Los ejes ortogonales presentan ángulos de 100-120 y 140º.
- Perspectiva oblicua: en este tipo, las líneas perpendiculares al plano de la representación presentan una inclinación diferente a los 90º. Un tipo de perspectiva que permite que las caras paralelas del plano se puedan representar a una escala real. Dentro de la perspectiva oblicua se destacan:
Perspectiva militar
La perspectiva militar, también conocida como cabinet, es un tipo de proyección que utiliza tres ejes cartesianos (x, y, z) para así poder representar las distancia en el plano horizontal y mantener las proporciones y dimensiones de los objetos representados. Un sistema de representación hipotético e ideal.
Perspectiva caballera
La perspectiva caballera emplea todas las dimensiones en su magnitud real, tanto las de proyección frontal como las paralelas. Las dimensiones X y Z se proyectan en alto y ancho, según su magnitud real, mientras la Y, la profundidad, se somete a un coeficiente de reducción, normalmente siguiendo una proporción determinada, esto es, un 1:2, 2:3 o 3:4.
Perspectiva cónica
Este sistema de representación gráfica se basa en la proyección de un cuerpo tridimensional sobre el plano, lográndose así reproducir los objetos o figuras tal cual las ve el ojo humano. Este tipo de perspectiva fue formulado por Filippo Bruneslleschi en 1451. Este pintor renacentista desarrolló las leyes de la perspectiva cónica mediante dibujos de edificios en planta y alzado y marcando las líneas que convergen hacia el punto de fuga.
Perspectiva lineal
La perspectiva lineal o también llamada perspectiva cónica, es un método matemático con el que se pretende representar elementos tridimensionales sobre una superficie plana, ya sea una pared, lienzo, tabla… que es bidimensional. ¿Y cómo?, pues a través de la proyección de líneas rectas que sobre el mismo plano confluyen en un mismo punto.
Dicho de una manera más coloquial, imaginémonos observar una pirámide desde la base; vemos como todos sus lados convergen en un mismo punto (la cima), pues bien, eso mismo, es lo que los artistas van hacer, es decir, a la hora de representar ya sean objetos, personajes, pavimentos… antes de pintarlos como tal, van a crear un sistema de líneas rectas y paralelas, que se conocen también líneas de fuga y que concluyen en un punto elegido de forma arbitraria por el artista, con el que se establecerá esa ilusión de profundidad.
De este modo, los elementos que se sitúan más cercanos a nosotros parecerán más grandes que aquellos que estén más próximos al punto de fuga.
Algunos de los ejemplos más característicos donde poder observar este tipo de perspectiva del que estamos hablando, son La Anunciación de Fra Angélico y La Ultima Cena de gran Leonardo da Vinci.
Perspectiva aérea
La perspectiva aérea o también llamada perspectiva atmosférica consiste, al igual que todas las perspectivas, en representar la profundidad o esa sensación de lejanía; en este caso mediante la gradación del color, así como la nitidez a medida que se van alejando los elementos en el plano.
La perspectiva aérea es un paso más allá respecto a la perspectiva anterior, la perspectiva lineal, y es que ahora esas líneas que concluían en un punto, se van a esfumar. El método es eliminando los límites que estas establecían del color y de la forma, dando así lugar a una representación muy real de la distancia.
En la perspectiva aérea, a medida que la distancia se va haciendo cada menor, la nitidez va disminuyendo y los contornos de los objetos, personajes… son cada vez más desdibujados y borrosos, lo mismo que ocurre en la realidad. Por lo que respecta al color, veremos que cuanto más lejos este representado un objeto sus colores serán cada vez más tenues.
El ejemplo más clarividente sobre esta perspectiva son Las Meninas de Velázquez, y la Gioconda de Leonardo da Vinci. Este último fue el responsable de acuñar el término de perspectiva aérea y así lo refleja en su Tratado de la pintura.
Otros tipos de perspectiva en pintura
Además de las dos perspectivas anteriores, la perspectiva lineal y la perspectiva aérea, que son las más utilizadas, tenemos que nombrar otros tipos de perspectiva en una pintura que también se dan en la representación de la pintura, aunque en menor medida y son:
Perspectiva oblicua
Es un sistema por el cual, en vez de utilizar un único punto de fuga, se utilizan dos, y ambos se encuentran sobre la línea del horizonte que para que nosotros nos entendamos, es la que corresponde a nuestro punto de vista. Pues bien, esos dos puntos se van a encontrar en un ángulo de 90º con el vértice de nuestro punto de vista.
Después desde los distintos puntos de fuga se trazarán líneas horizontales hasta llegar a la línea vertical que emana del punto de fuga, dándose así una mayor profundidad a los elementos.
Perspectiva invertida
Se trata de otro tipo de perspectiva que se diferencia de todas las anteriormente comentadas en que el punto de fuga que siempre hemos situado dentro de la pintura, en este caso como bien su nombre indica, se invierte y es que se sitúa delante, es decir, al exterior.
Perspectiva de importancia
Es la más fácil de comprender, y es que tan solo consiste en resaltar ya sea un objeto o un personaje con un tamaño mayor respecto a todos los que se encuentren a su alrededor para saber cuál de las figuras es más importante.
¿Qué es la perspectiva en una pintura?
La perspectiva es el sistema, arte o técnica empleados para plasmar volúmenes tridimensionales y sus relaciones espaciales sobre un plano o superficie bidimensional. Algo para lo que se emplean rectas que convergen a medida que se alejan. Así, la perspectiva lineal presenta los objetos en el espacio tal y como los vería un espectador que se ubicase justo frente al cuadro.
Cualquier dibujo o pintura que se realiza tiene una perspectiva u horizonte y el nivel visual del espectador puede situarse tanto por debajo como por encima del plano del cuadro, creándose una dimensión ficticia según las tres dimensiones: el ancho, el alto y la profundidad; o el ancho y el alto en los dibujos bidimensionales.
Se puede definir la perspectiva como el modo en el que el ojo humano ve el mundo, esto es, los objetos más cercanos parecen más grandes, mientras que los más alejados parecen más pequeños. Una manera de recrear la profundidad de los objetos y/o las figura y reproducir la realidad de manera realista. Algo que se evitó en algunos estilos artísticos como forma de no reproducir la realidad tal cual y distorsionarla para crear un estímulo o reacción en el espectador.
Los elementos de la perspectiva en pintura son:
- La línea del horizonte o línea imaginaria que nos permite situar las figuras y objetos en el espacio. Para representarla se traza un pinto que une dos planos, tierra y cielo. Se utiliza para aportar profundidad a una pintura o a un dibujo.
- El punto de fuga es un punto en el que parecen converger todas las líneas y que permiten crear la ilusión de profundidad. En un dibujo pueden existir varios puntos de fuga.
- El punto de vista o lugar desde el que el espectador observa la pintura.
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