Rinconete y Cortadillo: resumen corto

Es complejo analizar las Novelas Ejemplares de Miguel de Cervantes sin antes hacer una pequeña introducción a las obras que las componen y en qué circunstancias se escribieron.

En total, fueron 12 las novelas que vieron la luz desde la pluma de Cervantes. En ellas, el autor trata de ofrecer, a través de diversas historias y pasajes, el descubrimiento de personajes casi modélicos, de elevada moral, e incluso gran belleza física. Por eso podemos encontrar respeto hacia la mujer, por ejemplo, algo no siempre habitual en la época. De hecho, es una de las grandes críticas que se les hacen a estas obras, que son excesivamente moralistas y poco realistas, pero por ello son ejemplares.

Sin embargo, más que historias, las Novelas Ejemplares narran en gran medida pasajes sin un hilo conductor claro, casi como si fuesen descripciones de sucesos y hechos que llevan al lector a un esquema de lectura moralizante, es decir, realizando una tarea educativa en su época. Este fenómeno también se da en la novela de hoy.

En total, Cervantes publicó 12 novelas, pero en esta lección nos centraremos en Rinconete y Cortadillo. Esta obra se incluyó en un manuscrito que recibió en nombre de Porras de la Cámara y, en el mismo, encontramos dos historias, la propia, que nos ocupa aquí, y El celoso extremeño.

Se cree que, ya fueran en imprenta o previa a esta, e incluso que pudo ser el propio Miguel de Cervantes, ambas fueron muy retocadas antes de ver la luz definitiva. Y es que el escritor comenzaba a gozar de cierta fama y protección y podría desear evitar recortes de censura y mala publicidad, por lo que se adaptaron a una versión más entendible y que no afectara a la reputación de su autor.

Imagen: Slideshare

Comenzamos este resumen corto de Rinconete y Cortadillon hablando de la historia de dos chicos, Diego Cortado y Pedro del Rincón. Ambos se han escapado de casa y marchan por el camino de Toledo hasta Andalucía, que es donde se conocen, entablarán amistad y comenzarán sus desventuras.

Pedro y Diego son dos chicos de 15 años que escapan de un hogar donde son maltratados por sus propias familias. No obstante, este hecho les ha permitido agudizar el ingenio, por lo que tienen una habilidad notoria para sobrevivir y escapar de todo tipo de situaciones.

Aun así, camino de Sevilla pierden todo su dinero, robados por un arriero bastante tramposo en los juegos de cartas. Por ello, llegan a la ciudad andaluza sin nada, aunque allí consiguen trabajo como mozos para portar mercancías.

No obstante, no son chicos con mucho amor por el trabajo, así que deciden robar a un sacristán que porta una bolsa con dinero, hecho que no pasa desapercibido para Ganchuelo, un chico que se acerca a ellos para hablarles del mal oficio de robar. No obstante, si persisten en elegir esa profesión, es preferible entrar en un grupo de ladrones que comanda Monipodio, un delincuente profesional y maestro entre los golfos, bribones, etc. Él es quien controla el comercio en la ciudad, por lo que protege a los miembros de su cofradía a cambio de que cumplan sus funciones.

A raíz de conocer a Monipodio, Pedro y Diego pasan a ser Rinconete y Cortadillo, sobrenombres que para el maestro ladrón son ideales para sus edades.

Como bien hemos dicho antes, las Novelas Ejemplares de Cervantes no tienen una historia clara en sentido clásico y estricto, sino más bien pasajes temporales que narran con realismo moralizante diversas situaciones cotidianas.

En este caso, sabemos que con el dinero que los chicos roban, Monipodio les hace que paguen velas para santos y novenas para vírgenes, creyéndose así buenos cristianos. Ellos han de cumplir con sus obligaciones de creyentes, igual que las prostitutas y bribones que forman la banda, como Maniferro o Chiquiznaque.

Además, son espectadores de otro pasaje en el que una prostituta, Cariharta, que recibe una paliza de Repolido, es consolada por otra prostituta, Grananciosa. Es decir, un pasaje más en la vida de estos chicos que no sigue la linealidad clásica de las historias con exposición, desarrollo y desenlace propiamente dicho en su sentido habitual, algo que sí vemos en otras obras del autor, como el propio Quijote.

Por ello, el final de la obra no queda claro, o es más bien abierto. Tal vez había más novela por escribir, o bien simplemente buscaba narrar un pasaje de la vida de los protagonistas, tal y como sucede en la mayoría de las Novelas Ejemplares de Cervantes.

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