Órganos homólogos y análogos: diferencias

Antes de entrar a conocer las diferencias entre órganos homólogos y análogos es importante que conozcamos bien ambos términos.

Los órganos homólogos son aquellos que poseen la misma estructura interna, pero su forma externa y su función son diferentes. Los órganos homólogos son evidencia de que las especies tienen un ancestro en común, la adaptación de estas especies a las diferentes formas de vida provocó estos cambios en la forma externa o función de los órganos, esto es conocido como divergencia evolutiva.

Ejemplos de los órganos homólogos

Veámoslo con un ejemplo: el brazo de un ser humano, la pata de un perro, la aleta de un delfín y el ala de un ave son las extremidades de diversos seres vivos y tienen en común algunas estructuras internas como los huesos, las articulaciones y los músculos que los componen, pero por fuera son muy diferentes, si bien todas sirven para la locomoción, cada una tiene una particularidad diferente, la extremidad superior del ser humano sirve para agarrar objetos, las patas de los perros están adaptadas para correr, las aletas del delfín sirven para nadar y las alas de las aves para volar.

Los órganos análogos, también se los conoce con el nombre de homoplásicos, poseen la misma función en diferentes seres vivos, pero difieren en su estructura y no tienen un mismo origen, no tienen un antepasado en común. En este caso, según la teoría de la evolución, aquellas especies que poseen un estilo de vida similar y son sometidas a procesos de adaptación ambientales parecidos, pueden evolucionar de forma independiente a estructuras semejantes y este proceso es conocido como convergencia evolutiva.

Ejemplos de órganos análogos

Por ejemplo, las alas de diferentes especies de seres vivos. Los seres vivos que están adaptados al vuelo poseen alas, pero si comparamos las alas de un insecto, con las de una ave o un murciélago, notaremos que poseen diversas estructuras y formas, por más que cumplan la misma función.

Ya vimos de qué se trata cada uno, ahora vamos a conocer las principales diferencias entre órganos homólogos y análogos.

Para estudiar y desarrollar la taxonomía, ciencia que estudia los principios para la clasificación de los seres vivos y la teoría de la evolución propuesta por Charles Darwin, es fundamental poder reconocer y relacionar las estructuras anatómicas de las diversas especies. Las homologías y analogías son indicadores fiables para determinar la relación entre los seres vivos que se están estudiando.

1. Los órganos homólogos, a diferencia de los análogos, poseen un origen embrionario en común, lo que quiere decir que provienen de un mismo ancestro. Los análogos, por el contrario, tienen un origen embrionario diferente y no poseen un ancestro en común.
2. Las especies que poseen órganos homólogos viven en condiciones ambientales diferentes, en cambio, los seres vivos que poseen órganos análogos comparten condiciones ambientales similares. Esto quiere decir que las especies que poseen órganos homólogos se pueden observar en diferentes ambientes, en cambio, los que poseen órganos análogos suelen habitar en ambientes de características parecidas.
3. El tipo de evolución de los órganos homólogos es divergente, en cambio, la evolución de los órganos análogos es convergente.

El estudio comparativo de las especies refleja el grado de parentesco entre ellas.

Para terminar esta lección de las diferencias entre órganos homólogos y análogos, vamos a dejarte más ejemplos de cada uno de ellos.

Ejemplo de órganos homólogos

Un ejemplo claro de homología son los miembros pentadáctilos (de 5 dedos) de los tetrápodos, no se conoce a ciencia exacta cuál es la razón de la presencia de los cinco dedos, pero se sabe que este patrón permite reconocer que las especies que los presentan poseen un ancestro en común, tienen un mismo origen. Hay especies que pierden los dedos en el desarrollo, pero estas estructuras están presentes desde la etapa embrionaria. Esto quiere decir que todas las especies que presentan miembros pentadáctilos en su estado embrionario proceden del mismo antecesor.

Hay dos ejemplos de especies que han perdido las extremidades, la ballena no poseen extremidades posteriores y las serpientes perdieron las cuatro extremidades, pero en su estructura ósea, se puede evidenciar vestigios de las inserciones de las extremidades, lo que sugiere que también evolucionaron de los organismos tetrápodos y no de forma independiente.

Ejemplo de órganos análogos

Si hablamos de analogías podemos hacer referencia a las aletas de los tiburones y de los cetáceos, ambas estructuras poseen la misma función, pero internamente son anatómicamente diferentes, esto indica que no provienen de un mismo ancestro, la evolución de estos animales proviene de diversos linajes.

Si deseas leer más artículos parecidos a Órganos homólogos y análogos: diferencias, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Biología.