Piero Manzoni: obras de arte más importantes

Piero Manzoni fue un noble italiano que dio la espalda a todas las normas establecidas de la producción artística, convirtiéndose en uno de los artistas más irreverentes y satíricos al llegar incluso a hacer arte con sus propios excrementos.

Todo es ironía y humor, siendo su obra inspiración de movimientos posteriores a su temprana muerte, falleció a los 29 años. Así, Manzoni influyó de manera relevante en movimientos artísticos como Performance Art y en el arte conceptual. Entre las características más destacadas de su obra señalamos:

• Su obra es irreverente, humorística, siendo transgresora y buscando siempre provocar una reacción en el espectador. Así, su obra es una crítica implícita al consumismo y a cómo funciona el mercado del Arte.
• Se vio muy influenciado por la vanguardia europea de posguerra.
• En su producción artística es clave la idea del cuerpo como objeto de arte y cómo todos los procesos corporales pueden ser empleados como procesos artísticos. Una idea que influirá en el Performance Art, siendo muchos los artistas posteriores que emplearán sus propios cuerpos como material artístico capaz de resistir la mercantilización y subvertir así el comercio del Arte.

Achrome es una serie de obras creadas con diferentes materiales y texturas en las que usa caolín (arcilla blanca) sobre lienzo para componer unas obras conocidas como “pinturas incoloras”. Para hacer esta serie de pinturas, Manzoni se inspiró en las obras monocromáticas de Yves Klein. Entre los materiales empleados se destacan la paja, el plástico y el algodón, refiriéndose Manzoni a ellas como “la carne viva”.

En esta obra, Manzoni subvierte tanto las técnicas tradicionales de la pintura, haciendo presente su idea de hacer que el arte desaparezca por completo y sea el espectador quien proyecte significado en ellas. Unas imágenes absolutas que se limitan a ser, sin expresar emociones o mostrar el mundo. Una postura anti-arte que recuerda la admiración de Manzoni por el Dadaísmo y por los readymade de Duchamp.

Líneas es otra de las obras de Piero Manzoni más destacadas. Este trabajo consiste en una única línea continua, impresa con una prensa de periódico sobre una larga tira de papel que luego el artista enrolló e insertó en un tubo de cartón. Tras estar en exhibición, los dos tubos hechos por Manzoni fueron vendidos con la condición de no abrirse nunca. Solo la etiqueta de embalaje de cada tubo garantizaba quién era el autor, además de la fecha y la longitud exacta de la línea impresa en el interior.

La idea de Manzoni era crear una obra totalmente conceptual al existir la línea solo en la mente del espectador. Una obra inmaterial e invisible, ya que abrir el sello del tubo conllevaba que la obra dejase de existir y dejase de ser arte. Sea como fuere, y pese a los deseos de Manzoni, los tubos fueron abiertas y exhibidas.

Esta fue una performance realizada por Manzoni durante una conferencia en la Galleria Azimut (de la que era copropietario con Enrico Castellani). En su transcurso, Manzoni marcó unos huevos duros con la huella de sus dedos, insistiendo en que al hacerlo se convertían en "arte". Luego se comió uno de los huevos antes de ofrecer el resto al público. Manzoni señaló cómo el consumo de huevos cumplía su deseo de que la obra de arte desapareciera, además de que, al comerse el huevo, el público se convertía en una obra de arte debido a su contacto con la mano del artista.

Esta performance se adecuaba a la idea de Manzoni de considerar que el artista tiene un "poder sacerdotal" y cómo con el toque del artista se consagraban los objetos aparentemente mundanos o desechables. Un trabajo que también puede interpretarse como un reflejo del consumismo que dominó gran parte de la sociedad italiana después de la Segunda Guerra Mundial, así como la noción católica de transubstanciación. Sin duda, una de las obras de arte de Piero Manzoni más importantes.

Y dentro del grupo de las obras más importantes de Piero Manzoni también se destaca Artist's Breath o Aliento del artista. En esta obra continúa su exploración de la acción santificadora del artista. La obra consiste en globos inflados por el artista y fijados en tablas. Como decía el propio Manzoni, "cuando inflo un globo, insuflo el alma en un objeto que se vuelve eterno".

Manzoni cobraba 200 liras por cada litro de aire que soplaba en los globos, pero, al evaporarse lentamente su aliento con el tiempo, el objeto quedaba "sin valor". Una idea de comprar vacío o inmaterialidad que también fue perseguida por Yves Klein. Según los críticos, Manzoni también transmitía con esta obra toda la tragedia de la Segunda Guerra Mundial. El globo desinflado era una metáfora del cuerpo desinflado de una persona rodeada por las secuelas de la guerra y en una cultura que valoraba cada vez más la producción en masa sobre la artesanía y la creación artística.

Esta es una de sus obras más famosas y exitosas de Manzoni. Una obra que constaba de 90 latas en las que, según Manzoni, se habían envasado 30 gramos de sus excrementos por lata. Cada una estaba etiquetada con el texto "Recién conservado, producido y enlatado en mayo de 1961" en inglés, francés, italiano y alemán. Estas latas se pesaron y se tasaron según el precio del oro en el momento de la producción.

Merde d'Artist es divertida, subversiva e irreverente, pero también es una seria denuncia del voraz consumismo posterior a la Segunda Guerra Mundial y un reflejo del compromiso de Manzoni con una expansión conceptual de los temas de su obra. Además, también es una irónica y mordaz respuesta a su padre.

Este era dueño de una fábrica de conservas (utilizando Manzoni las latas de su padre en la producción de la pieza) y en su día había comentado a su hijo que su obra artística era 'una mierda'.

Piero Manzoni fue uno de los grandes artistas italianos conocido por ser una de las figuras más notables y controvertidas del arte conceptual. Un artista provocador y polémico que desafió los límites del arte, dando un nuevo sentido al papel del artista y revolucionando el mundo del arte.

Manzoni comenzó su carrera artística a principios de la década de los años 50 y gano rápidamente una reputación como figura destacada de la vanguardia artística italiana.

Entre las obras más destacadas de Manzoni tenemos que destacar la serie de pinturas tituladas “Achrome”(Acromos). Esta serie está integrada por unas pinturas monocromáticas comenzadas en el año 1957 y que están hechas con materiales como yeso, algodón y coalín. Manzoni crea unas obras impactantes al aplicar estos materiales sobre lienzos en una capa de textura gruesa y texturizada.Unas obras muy ricas desde el punto de vista conceptual, explorando temas como la relación entre el espectador, la obra de arte y el artista.

Sea como fuere, toda la obra de Manzoni queda siempre eclipsada por una de sus obras más famosas y polémicas: “Merda d'artista” (“Mierda de artista”). Esta obra fue creada en 1961 y creó gran controversia por consistir en 90 pequeñas latas rellenas con las heces del artista. Una obra que tenía como objeto criticar y evidenciar la mercantilización del arte y el papel del artista como una especie de creador de objetos con un valor económico más que con un valor creativo. Así, Manzoni vendió sus latas por un precio igual a su peso en oro.

Otra de las obras que también tenemos que destacar por su carácter innovador y rupturista es la serie de esculturas en las que revolucionaba la tradicional relación entre el arte y el espectador.

Mazoni falleció en 1963 a temprana edad de 30 años pero su obra permanece viva por su carácter desafiante e innovador, rompiendo con las convenciones del arte y el papel del artista. A través de sus obras, Manzoni exploró temas como la materialidad, el valor y la relación entre el arte y el espectador, dejando un extraordinario legado en el mundo del arte contemporáneo.

Piero Manzoni nació en Soncino, Cremona, el 13 de julio de 1933, falleciendo en Milán el día 6 de febrero de 1963. Fue un artista conceptual cargado de ironía y una respuesta al arte convencional de su época. Así, Manzoni creó obras provocadoras y polémicas como crítica a la comercialización del arte y el concepto de artista como la parte creadora de un producto con un valor dentro de ese mundo mercantilizado, siendo también un producto.

Todo lo que el artista producía era arte y, siguiendo esa línea de pensamiento, Manzoni llegó a la conclusión de que desde el aliento a los excrementos del artista también eran arte.

Los comienzos de Manzoni están vinculados con el minimalismo y al estilo figurativo hasta que en 1956 se introdujo en el arte de vanguardia. Bajo la influencia de la obra pictórica de Klein, Manzoni produce “Acromos”, unos cuadros monocromáticos blancos realizados con materiales como el caolín. Así, Manzoni comienza a experimentar con nuevos materiales en el arte e introduce plástico, paja, lana de vidrio o algodón en caolín. Un momento artístico que le ubica entre el nuevo realismo y antecesor del arte povera.

Otro de los pasos de Manzoni hacia la vanguardia y la crítica hacia el mercado del arte fue su serie de esculturas neumáticas. Una forma de vender el aire de artista que le llevó a crear una nueva obra, “Aliento de artista”. Esta obra consistía en él hinchando globos y vendiéndose éstos con gran éxito.

La obra de Manzoni pasa a ocupar un espacio único y muy personal entre el Dadá y el arte conceptual. Sus trabajos son irónicos y divertidos y llega a extremos delirantes como firmar a personas y llamarlas obras de arte solo por estar firmadas por él o imprimir huevos cocidos con su huella dactilar para que luego el público los comiese en la propia galería.

La más conocida de estas obras polémicas es “Mierda de artista (1961), una auténtica provocación al hacer realidad los comentarios despectivos que su propio padre había hecho sobre su trayectoria artística. Así, mientras su padre consideraba que el arte de su hijo era una mierda, Manzoni enlató literalmente mierda en 90 latas de metal y las vendió al peso teniendo en cuenta la cotización del oro de ese día.

Sus excentricidades dentro del mundo del arte llegaron a que, a título póstumo, presentase una pieza titulada “Manzoni: vida y obra” que consiste en un libro de 60 páginas vacías.

El artista italiano Piero Manzoni es conocido por vender sus propias heces enlatadas como parte de una obra de arte titulada "Merda d'artista" (“Mierda de artista”) en 1961.

Es una de sus obras más conocidas y ya tiene más de 60 años, siendo una de las obras de arte más vivas al contar con una página web propia, merchandising, exhibir en algunos de los mejores museos del mundo y seguir vendiéndose por precios desorbitados en subastas internacionales. Así, en 2016, la casa de subastas Il Ponte de Milán vendió una de las latas, la número 69, por 275.000 euros.

La obra tiene su origen en el deseo de Manzoni de ironizar sobre el mercado del arte, además de burlarse también de las críticas de su padre, el conde Egisto Manzoni, quien solía calificar las obras de su hijo como mierda. Estos dos factores, además de contar el susodicho conde con un fábrica de enlatado, llevaron a Manzoni a realizar esta polémica obra.

Manzoni enlató lo que dijo ser sus excrementos, aún es un misterio qué es lo que enlató realmente, en 90 latas de metal. Las altas de unas dimensiones de cinco centímetros de alto y seis y medio de diámetro pesaban 30 gramos y llevaban la etiqueta “Merda d'artista”, además de estar firmadas por el artista. La lata también tiene una leyenda que dice que fue conservada al natural, producida y enlatada en el mes de mayo de 1961.

La “Mierda de artista” se tasó teniendo en cuenta el precio del oro, esto es, a 40 dólares los 30 gramos, vendiéndose cada lata por ese importe. Una inversión realmente rentable ya que, como ya hemos apuntado, una lata se vendió en 2016 por 275.000 euros.

Un amigo de Manzoni reveló en su día que las latas no contenían excrementos, sino 30 gramos de yeso, pero la comprobación no se ha llevado nunca a cabo para no hundir el precio de la obra.

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