Definición de Fauvismo

Dentro de los múltiples movimientos de vanguardia que emergieron en el tumultuoso comienzo del siglo XX se destaca el fauvismo o fovismo como primera de esas vanguardias.

Este fue un movimiento pictórico que surgió en el año 1905 en el Salón de Otoño inaugurado en el Grand Palais de los Campos Elíseos de París. Una exposición que, aunque inaugurada en 1903, fue en 1905 cuando se dieron cita los artistas más rompedores. Entre ellos se destacaron los se conocerían como fauves o “fieras”. Un curioso nombre para describir la sensación de fiereza y rebeldía que se desprendía de unos lienzos llenos de colores chillones, sin matices y, en muchas ocasiones, aplicados de manera arbitraria. Unas obras que galvanizaron a la rígida sociedad burguesa del momento.

Y aunque ya los impresionistas y postimpresionistas como Van Gogh y Gauguin habían sorprendido al público, la explosión de color de las obras de los fauves fue una conmoción. Así, el crítico Louis Vauxcelles denominó la exposición como “Donatello entre fieras” aludiendo a la escultura clásica que se localizaba en el centro de la sala donde se exponían los cuadros fauve, bautizando y consagrando a todo el grupo.

Además de la exaltación del color, el fauvismo también se caracterizó por el uso de colores puros de manera directa, la simplificación de las formas, la espontaneidad en las técnicas a utilizar y la expresividad a través del color, las figuras y las formas, dejando a un lado toda representación de corte naturalista.

Entre las principales características del fauvismo podemos destacar las siguientes.

Una exaltación del color

Los fauvistas se centraron en el color como herramienta para plasmar las emociones, la subjetividad del pintor. Se trata de exaltar el valor del color en sí mismo, empleando para ello colores puros aplicados de manera directa y con cierta arbitrariedad y evitando la representación naturalista.

Uso de trazos espontáneos y sueltos

La espontaneidad es protagonista y el pintor deja aflorar su subjetividad y sus sentimientos empleando para ello trazos feroces, sueltos y espontáneos, simplificando la técnica de dibujo empleada.

No muestran interés por la perspectiva y el modelado

La profundidad espacial, la perspectiva y el modelado quedan en un segundo plano, reflejándose esto en lo planas que suelen ser las figuras y no tener intención de imitar la realidad.

Temas fauvistas

Entre los temas representados hay un gusto por los retratos, paisajes, objetos cotidianos, escenas de interior y recreaciones idílicas de la naturaleza.

Influencias del fauvismo

En los fauvistas se pueden apreciar las influencias de artistas postimpresionistas como Vicent Van Gogh, Paul Gauguin, Georges Seurat y Paul Cézanne.

Aunque son muchas las obras que pueden recibir el título de obra más importante del fauvismo, “Mujer con sombrero”(1905) de Henri Matisse es una de las más icónicas por estar considerada como la primera obra del movimiento y ser uno de los cuadros expuesto en el Salón de Otoño de 1905 y generar, al igual que el resto de las obras, cierta polémica entre la crítica academicista.

Esta obra de Matisse (1869-1954) es un retrato de su esposa Amelie. El pintor, considerado como precursor del movimiento fauve, utiliza el color de manera provocativa al remarcar los contrastes y ser toda la obra una auténtica explosión de colores. De esta manera, Matisse libera al color del dibujo y rompe con todo lo anterior al aplicar el color de maner arbotraria, sin que haya el más mínimo intento de ser realista. Tampoco hay profundidad ni luces ni sombras, aplicando el color de una manera arbitraria y simplificando las formas.

Esta obra fue adquirida por el matrimonio de Getrude y Leo Stein, grandes coleccionistas de arte de aquellos años, suponiendo la compra todo un respaldo para el pintor y el movimiento tras las críticas tan negativas que habían recibido en la exposición.

Otras obras destacadas del fauvismo son:

• “Retrato de Matisse” (1905) de André Derain
• “Retrato de Albert Marquet” (1904) de Charles Camoin
• “El puerto de Amberes”(1906) de George Braque
• “Los grandes árboles” (1907) de G. Braque
• “El Remolcador en el Sena, Chatou” (1906) de Maurice de Vlaminck

Entre los artistas más importantes del fauvismo se destacan los siguientes.

Albert Marquet (1875-1947)

Amigo de Matisse y artista fauve, Marquet tuvo unas primeras composiciones caracterizadas por un estilo fauvista claro, con control del dibujo y la luz y una intensificación del color tanto en los tonos fuertes como en los más suaves. Con el tiempo pasó un estilo más naturalistas, pintando sobre todo paisajes, retratos y desnudos femeninos.

Henri Matisse (1869-1954)

Matisse fue dibujante, grabador y escultor, siendo más conocida su faceta como pintor, siendo reconocido como uno de los pintores que más contribuyeron a las vanguardias y a la revolución y renovacion del arte a principios del siglo XX.

Maurice de Vlaminck (1876-1958)

Vlaminck es otra de las grandes figuras del movimiento fauve. En sus paisajes siempre dejando en un segundo plano los detalles para plasmar su estado de ánimo a través del color y de trazos y pinceladas violentas.

André Derain (1880-1954)

Derain trabajó con Matisse en 1905 y ambos expusieron sus rompedoras obras en el Salón de Otoño. Realizó unos 30 cuadros en los que representó paisajes de Londres con colores y composiciones de lo más novedosas.

Georges Braque (1882-1963)

Braque fue pintor, collagista, dibujante, escultor y grabador francés, siendo uno de los pintores más audaces del momento por su espíritu innovador tanto en el fauvismo como posteriormente en el cubismo. Pasó del impresionismo al fauvismo, evolucionando hacia el cubismo bajo la influencia de Cézanne.

Si deseas leer más artículos parecidos a Definición de Fauvismo, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Historia.