Características del materialismo histórico

El materialismo histórico es una de las mayores aportaciones de Marx a la filosofía y a la historia, quien descubre que son los modos de producción, necesarios para que el ser humano pueda sobrevivir, los que determinan los cambios sociales.

Las características del materialismo histórico son:

1. Enfoque en las condiciones materiales: Destaca que las condiciones económicas y materiales de una sociedad determinan su estructura social y desarrollo histórico.
2. Lucha de clases: Sostiene que el conflicto entre clases sociales, originado por la propiedad y las relaciones de producción, es el motor principal del cambio histórico.
3. Determinismo económico: Asegura que los modos de producción y las relaciones económicas influyen y determinan las estructuras políticas, sociales y culturales.
4. Desarrollo histórico: Considera que la historia se desarrolla a través de una serie de etapas económicas y sociales, desde el feudalismo al capitalismo y, potencialmente, al socialismo.
5. Proceso dialéctico: Utiliza el enfoque dialéctico para entender la evolución de la sociedad, donde el conflicto y la contradicción impulsan el cambio y el desarrollo.
6. Materialismo: Enfatiza que la base material de la vida social, como la economía y la tecnología, es fundamental para comprender la evolución histórica.

La producción de bienes materiales es el fundamento de toda sociedad y, sin los cuales, sería imposible la existencia de la misma. Gracias a la técnica y a través de los procesos de producción, el ser humano es capaz de influir en la naturaleza y coger de ella todo lo que necesita para su existencia. Por lo tanto, el desarrollo de la sociedad está vinculado a la producción de bienes materiales. De esta forma, el ser humano, entendido como fuerza de trabajo, se convierte en ”un animal que produce instrumentos”.

Al mismo tiempo que crece el dominio del ser humano sobre la naturaleza, avanzan las fuerzas productivas de la sociedad, cambiando los modos de producción y también las relaciones humanas en el proceso de la producción, esto es, las relaciones de producción.

A lo largo de la historia de la humanidad, se han venido produciendo una serie de cambios económicos y sociales, pudiéndose hablar de diferentes etapas a lo largo de la misma, y que no son más que transformaciones en los modos de producción.

1. Régimen de comunismo primitivo
2. Régimen esclavista
3. Régimen feudal
4. Régimen capitalista
5. Régimen socialista

Todos estos cambios se deben a la evolución de las fuerzas productivas de la sociedad, a las que está sujeta. Así, a una época, le sigue otra opuesta, que nace como consecuencia de la revolución que rompe con las antiguas relaciones de producción.

Ahora que ya conoces las características del materialismo histórico, vamos a ver qué es esta corriente de pensamiento. El materialismo histórico es una teoría desarrollada por Karl Marx y Friedrich Engels, filósofos que interpretaron el desarrollo histórico y social de las sociedades humanas a partir de las condiciones materiales de vida que les tocaba experimentar. Según esta perspectiva, las fuerzas productivas y las relaciones de producción son las principales determinantes de la estructura social, política y cultural.

El concepto central de esta corriente de pensamiento es que la forma en la que las sociedad producen y distribuyen los bienes materiales influye manera determinante en todos los aspectos de la vida. Marx y Engels argumentaron que la historia de la humanidad es esencialmente la historia de una lucha de clases constante. Una lucha que surge de las contradicciones inherentes en el modo de producción, donde diferentes clases sociales tienen intereses que se contraponen. De esta manera, en el capitalismo, la burguesía, grupo que posee los medios de producción, y el proletariado tienen interese opuestos, algo que genera conflictos sociales.

El materialismo histórico tiene como base el concepto de que las condiciones materiales y económicas son fundamentales para comprender los cambios y los desarrollos históricos. A diferencia de las teorías idealistas, aquellas que ven en las ideas y en las creencias los motores de cambio, el materialismo histórico sostiene que es el modo en el que las sociedades organizan la producción y la distribución lo que determina en última instancia la superestructura: las instituciones jurídicas, las religiosas, las políticas y las culturales.

El materialismo histórico podría considerarse no sólo como una herramienta para el análisis del pasado, sino también una guía para la acción revolucionaria. Marx y Engels creían que al entender las leyes que rigen el desarrollo social, los proletarios podrían organizarse y luchar de manera eficaz por una sociedad sin clases, donde los medios de producción sean de propiedad común.

Estas son las etapas de la historia de la humanidad según el materialismo histórico:

1. Régimen de comunismo primitivo

No existía la propiedad privada sobre los medios de producción y, por lo tanto, no existían las clases sociales y la distribución del trabajo era comunitaria. Pero la falta de una estructura económica (producción de autoconsumo) hacía vulnerable a esta sociedad. No obstante, el descubrimiento del fuego y, con él, de la técnica, posibilitó su desarrollo hacia otro estadio.

2. Régimen esclavista

Como consecuencia de los cambios en los modos de producción, nace el Estado, o lo que es lo mismo: la dictadura de la clase dominante, dejando sin poder al pueblo, entendido ahora como esclavo, que era quien trabajaba, pagaba impuestos y servía de sustento al amo. Sus principales actividades económicas eran la agricultura, la ganadería y el comercio. En esta etapa, aparece la diferencia de clases.

3. Régimen feudal

En el sistema feudal, los siervos cultivaban para subsistir y para poder pagar los diezmos a la Iglesia y la renta al señor. Poco a poco, aparecen las ciudades, centros comerciales y artesanales, y en las que se da una jerarquía entre los trabajadores. Mejoran las técnicas de producción y surge la caballería, formada por las clases nobles. Había una clara diferencia de clases y la sociedad se constituía de manera piramidal. La educación quedaba restringida a las clases dominantes.

4. Régimen capitalista

Los medios de producción pertenecen a la clase dominante, la única con derecho a la propiedad privada sobre los mismos y la actividad económica se basa en la compra y venta de productos que se lleva a cabo en el mercado, ahora, internacional. El capitalismo se caracteriza por la defensa del no intervencionismo del Estado en los asuntos económicos. El capital, es el principal elemento de producción y no el trabajo, ya que es capaz de generar riqueza y, al mismo tiempo, de controlar los medios de producción, en manos siempre de los que ostentan el poder, esto es, los que poseen capital.

La sociedad es libre y la generación de bienes materiales está unida a la ideas de bienestar, por la cual, todos los trabajadores intentarán sacar el máximo rendimiento de su trabajo, a fin de obtener mayores comodidades en la vida. Así, por su trabajo, recibirán una mínima parte para sobrevivir, el resto se lo queda el capitalista, y por lo tanto, nunca será el propietario de su trabajo, no tiene capital y tampoco vida, ya que se la pasa entera trabajando. En consecuencia, permanece ajeno al mundo y a su trabajo, está alienado.

5. Régimen socialista (como primera expresión del comunismo)

Sus modos de producción se basan en la propiedad social de los medios de producción, a partir de colaboración y reciprocidad de los trabajadores, en lugar de ser explotados, porque ahora las relaciones de producción están aseguradas por el carácter social de los medios de producción. Las clases sociales desaparecen y, con ello, las diferencias. Si quieres saber más sobre el socialismo, puedes leer este otro artículo sobre Socialismo: definición sencilla.

Imagen: Slidshare

Kark Marx desarrolló una teoría sobre el materialismo histórico con la que explicó el desarrollo de las sociedades humanas a través de las condiciones materiales y económicas de vida. Marx sostiene que la estructura económica de una sociedad, esto es, la base material de la misma. Es básica para entender su superestructura, que incluye las instituciones políticas, jurídicas, culturales y religiosas.

Para este pensador, la historia de la humanidad era una historia de lucha de clases. Una lucha que emerge de las contradicciones inherentes en el modo de producción de cada sociedad, donde diferentes clases sociales presentan intereses contrapuestos.

En “El manifiesto comunista”, obra de Marx y Engels, se señala cómo la historia de todas las sociedades humanas hasta nuestros días es la historia de la lucha de clases. Así, en el capitalismo, por ejemplo, la burguesía, que posee los medios de producción, y el proletariado, que vende su fuerza de trabajo, presentan intereses opuestos, generando así conflictos y luchas.

Según Marx, dentro del desarrollo histórico se pueden identificar varias etapas, caracterizándose cada una de ellas por un modo de producción específico. Así, Marx señaló cómo etapas:

1. el comunismo primitivo
2. el esclavismo
3. el feudalismo
4. el capitalismo
5. y, finalmente, el comunismo

Cada etapa presenta formas específicas de propiedad y relaciones de producción que entran en conflicto con el desarrollo de las fuerzas productivas. Este conflicto condice a transformaciones sociales revolucionarias.

En su obra “El Capital”; Marx analiza el modo de producción capitalista en detalle, describiendo cómo las relaciones de producción capitalistas generan desigualdades y contradicciones que inevitablemente llevarán a su colapso y el reemplazo por un modo de producción comunista. Marx argumenta en esta obra que el capitalismo es inestable y explotador, con una tendencia a la concentración de capital y la polarización de clases.

El materialismo histórico no sólo es una teoría descriptiva, también es prescriptiva. Marx creía que al entender las leyes que rigen el desarrollo social, los proletarios podrían organizarse y luchar eficazmente por una sociedad sin clases.

El objetivo final del materialismo histórico es ofrecer una explicación de cómo las condiciones materiales y las relaciones de producción impulsan el cambio social, proporcionando una base teórica para la acción revolucionaria y la transformación hacia una sociedad comunista.

A través de una serie de ejemplos históricos, es posible observar cómo la teoría del materialismo histórico se puede aplicar para dar explicación a los cambios sociales y políticos.

Uno de los ejemplos más claros es el paso del feudalismo al capitalismo vivido en Europa. Durante la Edad media, el sistema feudal estaba basado en la agricultura, la ganadería y la propiedad de la tierra. Los señores feudales poseían grandes extensiones de tierra y los siervos trabajaban en ellas a cambio de protección y una pequeña parte de la producción. Este modo de producción se estructuraba alrededor de relaciones de servidumbre y una economía centrada en el sector primario, básicamente en la agricultura.

Con el paso del tiempo, las fuerzas productivas terminaron por desarrollarse. La expansión del comercio, la aparición de nuevas tecnologías en el campo de la agricultura y el surgimiento de las ciudades mercantiles minaron la base del sistema feudal. La acumulación de capital y el desarrollo de nuevas formas de producción llevaron a la emergencia de una nueva clase social: la burguesía. Este grupo impulsó la transición hacia el capitalismo, un sistema basado en la propiedad privada de los medios de producción y la explotación del trabajo asalariado.

La Revolución industrial o la Revolución rusa de 1917 son otros dos ejemplos que demuestran cómo el materialismo histórico explica los cambios en las estructuras sociales y políticas a través de las transformaciones en las condiciones materiales y económicas, destacando siempre el papel desempeñado por la lucha de clases.

El principal logro de Karl Marx es haberse dado cuenta de que, en la sociedad, se dan determinadas condiciones en los modos de producción, objetivas y que serán las leyes de la economía las que rijan el destino de la sociedad.

“El caos y la arbitrariedad que imperaban en las opiniones sobre la historia y sobre la política dejaron el puesto a una teoría científica asombrosamente compleja y armónica, que revela cómo de un sistema de vida social, al crecer las fuerzas productivas, se desarrolla otro más alto, cómo de la servidumbre de la gleba, por ejemplo, nace el capitalismo” (Lenin).

Ya conoces todas las características del materialismo histórico, así que si tienes alguna duda, puedes dejarnos un comentario :)

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