El perspectivismo de Ortega y Gasset

A lo largo de la historia, diferentes corrientes y concepciones filosóficas como el escepticismo, el dogmatismo, el criticismo, el objetivismo o el relativismo, han intentado dar respuesta a tres de las cuestiones más debatidas ¿Qué es el conocimiento?, ¿Qué es la realidad?, ¿Qué es la verdad?

Sin embargo, para el filósofo Ortega y Gasset, todas las propuestas dadas hasta el momento eran erróneas y había que superarlas. Por ello, él nos propone lo que define como perspectivismo (su 2ºetapa filosófica), el cual se basa en las siguientes ideas básicas:

• Cada ser humano conoce la realidad según su punto de vista y todo conocimiento está sujeto a dicho punto de vista o perspectiva.
• La verdad existe, pero no la podemos llegar a conocer si no hacemos una suma de todas las perspectivas, es decir, si queremos conocer la auténtica verdad de una cuestión debemos conocer las diferentes versiones de dicha cuestión.
• En una perspectiva pueden confluir varias perspectivas, es decir, diferentes puntos de vista de distintas personas. Por tanto, cada perspectiva es valiosa (somos seres únicos) y la única perspectiva falsa es la que intenta ser única.
• En la correcta compresión de la realidad, del conocimiento y de la realidad, intervienen dos elementos imprescindibles: el sujeto (lo que conoce) y el objeto (lo conocido).

Para entender qué quiere decirnos Ortega y Gasset cuando afirma que la perspectiva es un componente de la realidad, tenemos que acudir a lo que define como circunstancia.

Y es que, según este filósofo, una circunstancia es todo aquello que forma parte de nuestro mundo, pero que no hemos elegido (año de nacimiento, padres, sexo, lengua, color de pelo…) y la que nos salva (la que nos permite vivir en un entorno/realidad). Es decir, mi circunstancia construye mi perspectiva desde la que conozco y construyo la realidad y desde de la que busco sentido a lo que me rodea y a la realidad. Como diría Ortega y Gasset:

“Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo”. Meditaciones del Quijote

Asimismo, Gasset nos dice que la circunstancia constituye la perspectiva particular de nuestra realidad y que, esa perspectiva, es la que aparece cuando organizamos lo que vemos y percibimos de la realidad.

Para Ortega y Gasset, la verdad no es absoluta, objetiva, única y atemporal (racionalismo), sino que la verdad solo la podemos conocer desde nuestra perspectiva particular y que se da desde la circunstancia de cada uno (= la circunstancia y la realidad del yo).

Por tanto, la verdad pasa por darnos cuenta de la realidad desde nuestra circunstancia y, por eso, es subjetiva, individual, temporal y una suma de perspectivas que se complementan: Debemos conocer las diferentes versiones de una cuestión porque son válidas y hay que reconocer al resto de individuos en la construcción de la verdad

“Quien quiera enseñarnos una verdad que no nos la diga: que nos sitúe de tal modo que la podamos descubrir nosotros mismos”. El tema de nuestro tiempo

En este sentido, el filósofo español para explicar claramente qué es la verdad, puso el ejemplo de la sierra de Guadarrama: una persona que vive en Segovia ve la sierra desde otra perspectiva que una persona que vive en Madrid, son dos miradas diferentes pero igual de verdaderas y complementarias.

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Con el raciovitalismo (3ª etapa filosófica) se intenta superar el vitalismo y el racionalismo, así como, unificar los conceptos de razón y vida.

Por ello, Gasset establece que la realidad de la vida es un caos que debemos ordenar con un esquema y que ese orden lo establecemos a través de la razón vital: una razón que no es absoluta (físico-matemática), sino histórica y narrativa, que es necesaria para entender la vida humana y que es la herramienta con la que construimos descripciones para orientarnos y acercarnos al mundo humano.

Asimismo, para explicar qué es el raciovitalismo, Ortega y Gasset utilizará la metáfora del náufrago: nuestro entendimiento serían los brazos del náufrago, pensar sería como para el náufrago nadar y el ser sería la balsa que el náufrago construye con lo que le rodea. Como diría nuestro protagonista:

“Vivir es encontrarse náufrago entre las cosas y en cada instante tenemos que tomar decisiones”.

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Junto a Ortega y Gasset, hay otros autores que se encuadran dentro del perspectivismo, como:

• Gottifried Leibniz (1646-1716): Con su teoría del conocimiento, Leibniz, afirma que el individuo se acerca al mundo desde su propia interpretación y que existen diferentes formas de acceder al conocimiento, las cuales, son al mismo tiempo formas verdaderas, contingentes y diferentes. Así, define a esas formas de acceder al conocimiento como perspectiva o puntos de vista que deben ser respetados, siempre y cuando tengan una coherencia lógica-formal.
• Gustav Teichmüler (1832-1888): En su obra Dei wirkliche und die scheinbare Welt (1882) establece que hay formas diversas de acceder al conocimiento de una realidad y que la justificación que nos lleva a cada una de esas formas se deben tener en cuenta.
• Friedrich Nietzsche (1844-1923): Este filósofo alemán establece que el conocimiento y el mundo se pueden afrontar desde distintos puntos de vista, todos ellos válidos y justificados. Siendo la perspectiva de cada sujeto única y los puntos de vista múltiples, lo cual, nos lleva a una mejor comprensión y más posibilidades interpretativas sobre una cuestión.

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